Los trofeos y campeonatos que ha ganado el fisiculturista loiceño radicado en Nueva York, Melvin Ortiz, le han requerido mucha disciplina y cambios en su estilo de vida que hasta lo separaron de quienes antes eran sus amigos.

Sin embargo, su alegría y entusiasmo son contagiosos, y su humildad hace que quiera honrar sus raíces.

Luego de completar su entrenamiento –al que dedica seis días a la semana, durante tres horas-, relató vía telefónica que su tío, José Ortiz, fue su modelo a seguir, ya que cuando él crecía lo veía levantando pesas.

“Siempre me gustó porque mi tío es fisiculturista. Pero no sabía hasta dónde podía llegar al convertir el deporte en una carrera, poder representar a Puerto Rico y a la comunidad latina”, expresó el atleta.

El joven de 28 años inició en el deporte hace tres años. El primero lo dedicó a alcanzar el peso ideal, aprender a alimentarse adecuadamente y ejercitarse, y los últimos dos, a trabajar con más intensidad en el levantamiento de peso y ejercicios, siempre de la mano de su tío y con la nutricionista Judith Oliver.

En un año ha alcanzado importantes posiciones en competencias como: Liberty Stay Natural, en Siracuse, NY; Natural USA; Professional, en Boston; Spirit of America, Mr. America (segundo lugar) y campeón del World Championship, en noviembre pasado. Esta última fue organizada por la World National Bodybuilding Federation (WNBF), el organismo más grande del mundo en la categoría de desarrollo del cuerpo sin anabólicos. Es el primer latinoamericano en alzarse con el premio.

Ortiz, criado en las parcelas Vieques, de Loíza, mencionó que compite en la categoría ‘Men’s Physique’, que busca más definición que volumen, lo que logra a base de alimentación y ejercicios, y no utiliza ningún producto artificial. De sus triunfos le han surgido auspicios, como un gimnasio y una línea de ropa, mencionó.

Su hermano, Darwin Ortiz, quien forma parte de su equipo de trabajo, también está en preparación para competir por primera vez en Rochester, NY, el 22 de abril. Ese día también será importante para Melvin, ya que competirá en su primer Natural USA Grand Prix, al cual irá, como siempre, con su patria en el corazón.

“Le dedico esa competencia a Puerto Rico”, afirmó. Su meta es participar en Mr. Olimpia y en el certamen Arnold Schwarznegger, dos de los certámenes de mayor antigüedad y reputación.

El deportista y padre de un niño de tres años que ya lo imita haciendo ejercicios, trabaja en un hogar para niños maltratados y con problemas de uso de sustancias. Luego de cinco años radicado en la llamada Gran Manzana, dijo que eventualmente quiere regresar a su natal Loíza para establecer un gimnasio para entrenar a jóvenes e impulsar sus carreras a nivel internacional. Que puedan experimentar la satisfacción que ha vivido a través del deporte, es lo que desea.