Tokio. La boricua Jasmine Camacho-Quinn hizo los ajustes necesarios en la carrera final de 100 metros con vallas y victoriosa alzó los brazos como campeona olímpica de Tokio 2020.

Su tiempo ganador fue de 12.37 segundos, por arriba de su marca en la semifinal, el 12.26 que se convirtió en un récord olímpico.

Camacho-Quinn celebró en grande su victoria. No era para menos. Hace cinco años, en su primera aparición olímpica en Río de Janeiro, fue descalificada en la ronda semifinal tras tropezar con la antepenúltima valla y no poder terminar la prueba. Esta vez,en cambio, fue muy superior en las tres carreras que hizo en los Juegos para darle a Puerto Rico una segunda medalla de oro en la historia de las Olimpiadas.

“No pensé que las Olimpiadas fueran distintas a cualquier otra carrera. Así pude mantenerme enfocada”, dijo la atleta, quien se considera tímida y quien ha dicho que los nervios le afectan antes de cada carrera.

Camacho-Quinn le regaló a Puerto Rico una presea dorada por segundos Juegos Olímpicos al hilo, luego de la que ganó la tenista Mónica Puig en la edición Río 2016.

También es la segunda medallista olímpica del atletismo boricua y la primera campeona, luego de la medalla de bronce que consiguió el vallista Javier Culson en la edición Londres 2012.

Y representa la décima medalla olímpica que logra Puerto Rico a nivel olímpico, además de la primera atleta que establece un marca olímpica. Además ha dado a Puerto Rico una medalla por una tercera edición de los juegos consecutivos, algo que no había sucedido nunca antes.

Significa mucho. También es la primera medalla de oro en la pista para Puerto Rico. No lo pude haber logrado sola. Necesitaba el apoyo de mis padres, mi familia, mis coaches y, claro está, mis fanáticos

-Jasmine Camacho Quinn

Todo esos datos tenían feliz a Camacho-Quinn luego de la carrera.

“Significa mucho. También es la primera medalla de oro en la pista para Puerto Rico. No lo pude haber logrado sola. Necesitaba el apoyo de mis padres, mi familia, mis coaches y, claro está, mis fanáticos”, dijo.

La atleta recibió su medalla en la ceremonia de premiación a las 6:45 de la mañana de hoy en horario horario de Puerto Rico.

Camacho-Quinn tuvo situaciones al final de la carrera, pero las superó satisfactoriamente.

“Solo quería ganar el oro”, dijo.

La vallista pasó al frente la novena y penúltima valla. Pero la pasó con dificultad y tuvo que cambiar sus ritmo yendo a la décima valla, la que se aseguró de pasarla con altura suficiente.

“Fue nervioso, pero hizo el trabajo”, dijo su entrenador John Coghlan. “No puedo estar más orgulloso de ella”.

Para crédito de la atleta, Camacho-Quinn mantuvo su compostura en las tres carreras de más presión en su carrera, incluyendo la etapa semifinal aquí, que trajo el recuerdo de su caída en Río 2016. Como dijo su coach, Camacho-Quinn hizo el trabajo hasta cuando la carrera no fue perfecta.

Se imagina la parada

La atleta dijo que ya se imagina una parada en Puerto Rico para celebrar la medalla, tal y como ocurrió en el 2016, cuando la parada fue, sobre todo, para Puig como la primera medallista de oro olímpica de Puerto Rico.

En una posible parada, Camacho-Quinn será la reina como medallista de oro en Tokio 2020. Todavía quedan atletas en calendario para ganar medallas aquí.

“Si es como la del 2016, ¿cómo no? voy a esperar a que el momento llegue”, dijo la atleta.

La presidenta del Comité Olímpico de Puerto Rico, Sara Rosario, dijo que, aunque está deseosa de llegar a la isla, no ha concretado los planes sobre un posible recibimiento a Camacho-Quinn y a los otros 36 atletas de la delega