Una de las mujeres más fuertes del mundo es Tamara Walcott, originaria de St. Croix, Islas Vírgenes, quien ostenta el título de peso muerto crudo más pesado del mundo realizado por una mujer después de levantar 289 kg (637 libras) en julio de 2022. Sin embargo, lo que más ha asombrado es su historia de vida, pues su proceso como deportista ha sido muy diferente al de los demás.

En el 2018, a sus 37, Tamara se había divorciado y está criando sola a sus hijos. En ese momento, ella tenía obesidad mórbida, pues pesaba 414 libras. Tenía una adicción a la comida que ponía en peligro no solo su salud, sino también su vida, así lo describe en su página web.

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“Recuerdo pasar por mi divorcio, llorar en mi armario y decirle a mi hermana: Quiero perder peso. Quiero perder peso”, comentó Tamara a los medios de comunicación en el 2022, según lo recopilado por ‘El Español’.

“Pesaba 188 kilos (414 libras). Había momentos en los que compraba ropa y una semana después me estaba ajustando. Me di cuenta de que me estaba volviendo demasiado grande, tenía que volver a comprar cosas nuevas”, agregó.

Decidió coger las riendas de su vida

Al ver su situación decidió hacer algo para cambiar, en ese momento apareció el levantamiento de pesas, un deporte que se convirtió en una salida para liberar todos los factores estresantes que tenía en su vida mientras aprendía de disciplina y control.

En solo un año, Tamara perdió 45 kilos (99 libras) gracias a su cambio de mentalidad y perseverancia, ya que entrenar no era nada fácil, pues tenía que repartir su tiempo en criar a sus hijos, trabajar de 9 a.m. a 5 p.m. administrando un negocio y entrenar tres o cuatro veces por semana por la noche.

Durante todo este proceso, la mujer logró reemplazar su adicción por la comida por el ejercicio. “La nueva Tamara se tiraba al suelo y hacía flexiones, abdominales y saltos. Me sentía cansada. Entonces me decía a mí misma: Chica, siéntate, no tienes hambre”, afirmó.

Por levantar pesas la juzgaban en el gimnasio

Mientras descubría su pasión por el levantamiento de pesas, Walcott recibió varias críticas de las personas que asistían al gimnasio.

“Cuando comencé, escuchamos muchas cosas como: ¿Por qué quieres levantar? No vas a perder peso levantando, no deberías ir al banco porque te vas a ver como un hombre. La gente incluso me ha preguntado por las redes sociales: ¿Eres un hombre? ¿Eres realmente una mujer o eres un hombre? Di a luz a dos niños. Yo soy una mujer. ¿Por qué no puedo ser fuerte? ¿Por qué tienes que hacerme esas preguntas porque soy fuerte?”, explicó en ‘The Guardian’.

En tres años, Tamara ha competido en siete competencias de las cuales ganó seis, y tiene el récord del peso muerto más pesado del mundo levantado por una mujer. Ahora, ella se ha vuelto un referente para todas las mujeres que creen que no pueden salir de un mal momento.