Ginebra. El uso de marihuana seguirá prohibido en los eventos deportivos después de que la Agencia Mundial Antidopaje (WADA, por sus siglas en inglés) se resistiera el viernes a cambiar su estatus en la lista de sustancias prohibidas.

A la agencia se le pidió que revisara el estatus del THC, el ingrediente psicoactivo del cannabis, luego del caso de la velocista estadounidense Sha’Carri Richardson, quien no asistió a los Juegos Olímpicos de Tokio el año pasado.

Richardson cumplió una suspensión de un mes después de dar positivo durante los clasificatorios nacionales, en donde ganó los 100 metros. La velocista dijo que había fumado marihuana como una forma de sobrellevar la muerte de su madre.

En una decisión separada, el opiáceo tramadol ahora estará prohibido cuando los atletas estén compitiendo a partir de enero de 2024, decidió el comité ejecutivo de la WADA en una reunión en Sydney, Australia.

Los atletas que consumen cannabis fueron consultados por expertos designados por la WADA, entre cuyas conclusiones se incluyó que era “en contra del espíritu del deporte”, dijo la agencia.

Por lo tanto, las pruebas positivas a THC en carreras y eventos, aunque no durante entrenamientos, podrán continuar provocando suspensiones tan cortas como de un mes.

El debate “no es sencillo”, reconoció el viernes el director general de la WADA, Olivier Niggli.

“La WADA también es consciente de que las solicitudes de eliminación del THC de la Lista de Prohibiciones no están respaldadas por una revisión exhaustiva de los expertos”, dijo. “También somos conscientes de que las leyes de muchos países, así como las amplias leyes y políticas regulatorias internacionales, respaldan el mantenimiento del cannabis en la Lista en este momento”.

La WADA también resaltó el alto nivel límite para registrar una prueba positiva de THC, que es “consistente con un atleta con discapacidad significativa o un usuario frecuente”.

El tramadol ha sido un problema para el ciclismo, que prohibió su uso en las carreras a partir de 2019.

Después del Tour de Francia en julio, Nairo Quintana fue descalificado del sexto lugar cuando dos muestras mostraron rastros del analgésico narcótico sintético. Quintana no fue sancionado y ha impugnado su descalificación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo.

“El abuso de tramadol, con sus riesgos de dependencia física, adicción a los opiáceos y sobredosis en la población general, es motivo de preocupación y ha llevado a que sea una droga controlada en muchos países”, dijo la WADA.

La prohibición en competencias se hará cumplir a partir de enero de 2024, lo que dará tiempo para educar a los atletas y a los médicos jefes de las delegaciones y “abordar el uso seguro de tramadol con fines clínicos”, dijo la WADA.

Las reglas médicas de la Unión Ciclista Internacional (UCI) establecen que “los efectos secundarios adversos comúnmente informados del tramadol son mareos, somnolencia y pérdida de atención, que son incompatibles con el ciclismo competitivo y ponen en peligro a otros competidores”.