Personas con alguna discapacidad física tendrán la oportunidad de aprender a nadar con el programa “Rompiendo barreras” del municipio de Ponce.

Para matricularse, el participante debe estar inoculado contra el COVID-19 y tener más de 12 años.

Los interesados no necesitan tener experiencia en esta disciplina deportiva. El programa es libre de costo y las prácticas se repiten los lunes, martes y viernes de 4:00 p.m. a 5:00 p.m. en el Complejo acuático Víctor Vassallo.

Los coordinadores del programa recomendaron la presencia de los padres en el proceso de aprendizaje, para que observen y animen a sus hijos.

“Vamos a estar brindando clases de natación a personas con discapacidad para posteriormente ponerlos a compartir. Llevamos apenas dos semanas, y aunque ya unos nadan más que otros, ya todos están nadando”, aseguró el coordinador del programa, Max Borrero, al indicar que ya 16 personas están matriculadas.

El programa cuenta con dos asistentes de natación: Armando Rentas y Héctor De Jesús. Rentastiene Autismo, y De Jesús discapacidad intelectual. El municipio dijo que la participación de ambos “potencia la creación de lazos de empatía entre ellos y los participantes, fortaleciendo la autoestima y sus habilidades sociales”.

“Yo sé lo que este tipo de programa logra en nuestros hijos con discapacidades. Soy padre de una niña con el espectro del Autismo y he podido ver cómo el deporte, en su caso la equitación, ha logrado en ella grandes cosas. Así que, para mí, estas son las cosas lindas que provoca el deporte y el resultado cuando lo haces con amor, es sorprendente”, dijo el director de recreación y deportes municipal, Orlando Meléndez.