En sus años como tenista profesional, Mónica Puig aprendió una virtud que jamás pensó sería tan valiosa para su vida fuera del tenis. Enfrentada a largos periodos de rehabilitación, largos juegos sobre la cancha o incontables horas de esperas para conocer con certeza la hora de un partido en un torneo, a la campeona olímpica en Río 2016 no le quedó de otra que aprender a ser paciente.

Y precisamente poseer la virtud de la paciencia probó ser muy valioso cuando el pasado sábado tuvo que esperar casi seis horas para poder hacer su debut como telerreportera de ESPN en el campo del deporte del béisbol, o digamos que hasta del ámbito artístico, para poder entrevistar al exponente de música urbana y estrella mundial, Bad Bunny, durante la aparición de este en el juego de celebridades que formó parte de las celebraciones del Juego de Estrellas de las Grandes Ligas en Los Ángeles.

“Tuvimos que esperar mucho tiempo para poder hablar con Bad Bunny. Pero el tenis me ha enseñado paciencia y a saber esperar por mi turno para entrar a la cancha. Estoy dispuesta a lo que sea”, expresó Puig a Primera Hora por vía telefónica desde Los Ángeles, donde seguía activada por ESPN para las actividades del All Star y todo un día después de la celebración del Home Run Derby.

Puig, quien se cantó fanática del ritmo de la música de Bad Bunny, relató que está emocionada por los tiempos que está viviendo en ESPN como talento para participaciones como telerreportera más allá de una analista del tenis.

La joven que en su momento inició estudios universitarios conducentes al campo de la sicología y las comunicaciones, está viviendo la oportunidad de desarrollarse como talento de la televisión siendo guiada por mentores de la compañía.

“Estoy disfrutando mucho esta etapa. Y este fin de semana ha sido mi primera oportunidad en algo que no tenga que ver con el tenis. Ha sido un éxito hasta ahora”, puntualiza Puig, quien al firmar contrato con ESPN pidió no ser encajonada solo al deporte del tenis ya que es fanática del deporte en general y le gustaría poder moverse por diferentes facetas del mismo, desde el béisbol hasta la Fórmula 1.

Así las cosas, Puig ha comenzado ya a experimentar lo que es el mundo del periodismo.

“Me encanta el periodismo. Ahora entiendo muy bien el trabajo, el sacrificio y la horas que ponen los periodistas a su trabajo”, dijo Puig, quien siempre fue abierta a conversar con la prensa durante sus torneos.

La exatleta, quien anunció su retiro del tenis hace unos meses debido a que tuvo que someterse a una nueva cirugía del hombro, apuntó que con pasión perseguirá establecerse en el nuevo campo en el que se desempeña. Incluso una vez complete la ardua faena de comprar casa y de casarse hacia finales del año, buscará retomar sus estudios.

Por lo pronto, sin embargo, seguirá aprendiendo de los mentores que le han puesto los directivos de ESPN y buscando aprovechar cada oportunidad que le lancen para mostrar sus bastos conocimientos del tenis y otros deportes.

“Soy una estudiante de todos los deportes. Y me esforzaré por cubrir todos los eventos que me pidan. Además de hacer cosas para la página digital, social media y apariciones en Sportscenter. Siempre voy a estar disponible para lo que me pidan”.

Bad Bunny y Mónica Puig durante la entrevista que ésta le realizó al artista.
Bad Bunny y Mónica Puig durante la entrevista que ésta le realizó al artista. (Suministrada)

De vuelta a la experiencia vivida con Bad Bunny, a quien reconoció por su nombre de pila Benito Martínez, Puig se mostró sorprendida por la humildad del exponente que es una estrella mundial. Le llamó la atención incluso cómo el joven era un imán para atraer los peloteros.

“Conocerlo en persona fue algo totalmente diferente. Es tímido, calladito. Y Benito se nota que es un fanático de los deportes”, abundó Puig quien no perdió la oportunidad para preguntarle al artista cuándo se atreverá a jugar un juego de tenis contra ella.