¿Podrá Federer completar un Grand Slam en un mismo año?

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 15 años.
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Cuando Rafael Nadal dejó en lágrimas a Roger Federer tras vencerle en la final del Abierto de Australia el año pasado, la expectativa fue que el español tenía al alcance la posibilidad de completar el Grand Slam en una misma temporada.
Doce meses después, Federer es quien sonríe al encontrarse nuevamente en su pedestal de siempre.
Martina Navratilova, al comentar la final que Federer le ganó el domingo con autoridad a Andy Murray para conquistar su 16to grande, resaltó que el suizo tiene la capacidad para barrer con los títulos de las tres torneos que faltan: Francia, Wimbledon y Estados Unidos.
“Pese a sus lesiones, Rafa sigue siendo el rival a vencer en París”, dijo Navratilova sobre la cita en la arcilla de París. “Pero Roger es el hombre que puede lograrlo”.
Se trata de una gesta que sólo tres veces se ha logrado, la última cuando Rod Laver lo hizo en 1969. Laver también lo logró 1962 y el otro fue Don Budge en 1938.
Ser protagonista en el último día de un Slam es una rutina que se sabe de memoria, ya que ha dicho presente en las últimas ocho finales de los grandes y se ha alzado con cuatro.
Federer parece no tomarse en serio la posibilidad: “Si pasa, fenómeno. Pero no es que sea mi objetivo número uno”.
Ahora tiene 28 años y los comentarios previo al primer Slam de la temporada apuntaban a que la nueva generación —los Murray, Juan Martín Del Potro, Novak Dkojovic, Marin Cilic y Jo-Wilfried Tsonga— lo tenían finalmente atrapado en un rincón. Después de todo, el argentino Del Potro le superó hace cuatro meses en la final del Abierto de Estados Unidos.
Pero una de las conclusiones dejadas tras dos semanas de acción en el Melbourne Park es que el Federer versión 2010 está jugando mejor que nunca y sin perder los instintos de un campeón insaciable.
El mejor ejemplo se apreció con su derecha, un golpe devastador que enloqueció a sus oponentes por su forma de impactar la superficie con una fuerza demoledora. Murray, tal vez uno de los jugadores de mayor movilidad en el circuito, se vio a contramarcha en más de una oportunidad al sucumbir en tres sets en la final.
Mientras Del Potro ni siquiera pudo desembarcar en cuartos de final en su primer Slam tras la consagración en Nueva York, Federer volvió a exhibir la constancia que lo tiene en un panteón exclusivo.
Esa tranquilidad con la que afronta los desafíos es lo que hace vislumbrar que pueda hacerse con los cuatro en la misma campaña.
Ahora Federer da las gracias por el desafío planteado por la nueva generación.
“Me han estimulado bastante. Me han hecho un mejor jugador”, señaló tras vencer a Murray.
Australia también dejó otras conclusiones y curiosidades:
1- La pasividad no sirve. Mejor aprenda con Del Potro. Para jugarle a Federer en una final, o en cualquier otra circunstancia, lo mejor es plantarle cara. No se debe seguir el ejemplo Murray: replegado en el fondo, conservador en su táctica, conforme con devolver a la espera del error contrario. El modelo es el que mostró Del Potro en el US Open. Sólo cuando se soltó tras un pésimo primer set y arriesgó, la suerte fue otra. A Federer simplemente no se le puede regalar nada porque no perdona. Arriba dos sets en un grande no conoce la derrota en 156 partidos y está 172-5 tras ganar el primer parcial.
2- La final que Serena Williams le ganó a Justine Henin fue como un rayo de luz para las mujeres, donde la calidad ha mermado. Fue la primera final que se extendió al máximo de tres sets desde Wimbledon en 2006, cuando Henin perdió Amelie Mauresmo. Este fue apenas el segundo torneo de Henin tras un retiro de dos años y su ambición es ganar el Slam que le falta, llámase Wimbledon.
3- Los favoritos ganaron cuatro de los cinco títulos. Aparte de Federer y Williams en los individuales, los mellizos Bob y Mike Bryan revalidaron el título de dobles masculinos y Cara Black y Leander Paes levantaron el trofeo de dobles mixto. Venus y Serena Williams, segundas preclasificadas, se llevaron el título del doble femenino.
4- Ojo a las chinas. Li Na y Zheng Jie lograron avanzar hasta las semifinales, la primera vez que dos jugadores chinas alcanzaron al unísono esa ronda en un Slam. Lo hicieron en el torneo que es considerado como el Slam de Asia y ello sólo puede promover más el deporte en un país en el que tanto la ATP y la WTA se desviven por penetrar.