Tokio. Hidilyn Díaz se convirtió el lunes en la primera medallista de oro olímpica de Filipinas, al ganar la división femenina de 55 kilogramos y detener la apuesta de China por unos juegos perfectos en levantamiento de pesas.

En sus cuartos Juegos Olímpicos, Díaz superó a Liao Qiuyun, de China, en su último levantamiento en el envión (clean and jerk) para ganar con un total de 224 kilogramos. Ese fue un kilo más que Liao.

Filipinas ha competido en todas las ediciones de los Juegos Olímpicos desde 1924 -excepto por un boicot a los Juegos de Moscú en 1980- y había conseguido tres medallas de plata y siete de bronce antes de la victoria de Díaz. Anteriormente había ganado una medalla de plata en 2016, que fue en ese momento la primera aparición de su país en un podio olímpico en 20 años.

Al momento China había ganado los tres eventos en la competencia de levantamiento de pesas y esperaba barrer las medallas de oro en las ocho competencias en las que participaron sus atletas. Ningún país puede inscribirse en más de cuatro eventos masculinos y cuatro femeninos. Liao entró a la competición como poseedora del récord mundial con un total de 227 kg.

Hidilyn Diaz, de Filipinas, se emociona en el podio luego de colgarse oro, el primero en la historia de su país.
Hidilyn Diaz, de Filipinas, se emociona en el podio luego de colgarse oro, el primero en la historia de su país. (Luca Bruno)

Zulfiya Chinshanlo, de Kazajistán, se llevó el bronce con 213 kg. Chinshanlo ganó la que entonces era la división de los 53 kilogramos en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero fue despojada de su medalla de oro luego de una prueba positiva para dos esteroides prohibidos que se encontraron cuando se volvió a analizar su muestra en 2016.

Muattar Nabieva, de Uzbekistán, lideró la competencia con un arranque de arranque de 98 kg, pero quedó 9 kg detrás de Chinshanlo en el envión y finalizó en cuarto lugar, perdiéndose el podio por un kilogramo.