En formación una cepa de voleibolistas que promete
Un grupo se está destacando en la NCAA, como lo hizo la camada que lideró Picky Soto en los años 2000 y que puso el voleibol boricua en el mapa mundial.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
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El esquina boricua Pelegrín Vargas, hijo, está primero en la NCAA en remates y puntos por sets. De cerca le sigue el opuesto y compatriota Gabriel García, quien es además el líder en servicios directos.
Los dos se están destacando para universidades importantes en el voleibol universitario. Vargas juega para la novena clasificada de la nación, Purdue Fort Wayne, y García para la segunda clasificada Brigham Young University.
Estoy bien contento con ellos. Me alegra mucho por el voleibol nacional y por ellos. Por fin sale una generación diferente que nos pueda representar en la NCCA e internacionalmente. Hay una esperanza de que estos chamacos salgan adelante
-Víctor 'Vitito' Rivera / Exjugador nacional
El senior Vargas lidera en remates por set con 4.82. El júnior García es el sexto mejor con 4.09.
En puntos por parcial, Vargas es el mejor con 5.50, mientras que García está tercero con 5.47. García lidera en servicios directos con .886 por set y un total de 44 aces.
Son jóvenes que encabezan una cepa que están en desarrollo y hace recordar a la destacada camada de boricuas que jugaron en la NCAA a principio de los años 2000 y que lideraron Héctor ‘Picky’ Soto y Víctor ‘Vitito’ Rivera, la cual se tradujo en la base de un gran Equipo Nacional que entregó a borinquen grandes resultados internacionales y se dejó sentir allende de los mares.
Rivera, quien fue un dos veces Jugador del Año de la Conferencia MIVA y finalista a Jugador del Año de la NCAA en el 1999, ha visto el desarrollo de estos dos jóvenes y ve una esperanza.
“Estoy bien contento con ellos. Me alegra mucho por el voleibol nacional y por ellos. Por fin sale una generación diferente que nos pueda representar en la NCCA e internacionalmente. Hay una esperanza de que estos chamacos salgan adelante”, dijo Rivera.
Vargas, egresado del colegio San José de Río Piedras, y García, graduado de St. Francis School de Carolina, son líderes de una cepa más amplia que sigue mejorando su voleibol en la NCAA.
Se está tratando de que esa generación esté lista para el 2024, pero diría que es más probable para el 2028
-Jamille Torres / Asistente del Equipo Nacional
También está el caso de Carlos Rivera, quienes es el acomodador titular de la universidad y cuarta clasificada Long Beach State. Rivera es sexto en la NCAA en asistencias por set con 10.28.
Otro acomodador, Ramiro Balaguer, está undécimo en asistencias con 9.70 para la universidad Sacred Heart. Y Roque Nido le sigue los pasos con 9.61 asistencias por parcial para el New Jersey Institute of Technology.
Vargas y Nido han sido dos de los cinco voleibolistas escogidos Jugador de la Semana de la NCAA en la corriente temporada, que concluía ayer su sexta semana de juego.
Otros que llaman la atención son los esquinas de segundo año Diego Negrón (Lindenwood) y Adrián Iglesias (Barton), así como el líbero Francisco Comas (McKenndee) y el acomodador Oscar Fiorentino (Barton).
“Te diría que tenemos una cepa por debajo de los 25 años, que incluye a jugadores profesionales, como Arturo Iglesias, Jonathan Rodríguez, Arnel Cabrera, que promete. Hay mejor talento ahí que el que tenemos en esa edad en la selección femenina”, comparó el asistente de la Selección Nacional masculina, Jamille Torres, destacando que en la versión masculina despuntan en esa edad las jugadoras Pilar Victoriá, Daly Santana y Neyra Ortiz, entre otras.
Sobre todos ellos, Vargas, de 6’4, y García, de 6’7, lucen con proyección para la Selección Nacional. De hecho, ambos fueron parte del seleccionado en los Juegos Panamericanos Lima 2019.
Ambos, unidos a jugadores jóvenes egresados de la LAI y de la NCAA que están jugando en Europa, dan esperanza a la Selección Nacional que en el 2007 estuvo clasificada octava en el mundo con jugadores de perfil NCAA como Soto, Rivera y José Rivera.
“Con Arturo Iglesias, Gabriel García y Pelegrín Vargas hay un trío para el recambio de lo que es nuestra selección”, dijo el exacomodador nacional y ahora dirigente de las Pinkin de Corozal, Ángel Pérez, quien tuvo un año de experiencia de la NCAA con Brigham Young University.
Iglesias, de 25 años y egresado de la California Baptist University en el 2016, está jugando en Polonia con el club Jastrbeski, que la semana pasada adelantó de ronda en la Champions League de Europa. Es el segundo colocador del equipo detrás del veterano alemán, Lucas Kampa.
Desde la salida de la Soto, los esquinas Rivera, Pérez y el central Luis ‘Feñito’ Rodríguez, la Selección Nacional ha descendido hasta el puesto 38 en el ranking mundial.
Aún así, la Selección es competitiva a nivel regional. Incluso ganó la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018 con Ossie Antonetti como dirigente. La Selección, de hecho, suma con cuatro medallas de oro en los últimos cinco Juegos Centroamericanos y del Caribe.
La mayoría de los jugadores de esta nueva cepa tiene todavía años de elegibilidad por delante en la NCAA. A García le restan, por ejemplo, dos años más de elegiblidad, incluyendo el corriente.
Se anticipa, por lo tanto, que el crecimiento de estos jugadores continuará con miras a que algunos den el salto al profesionalismo y a la Selección.
“Se está tratando de que esa generación esté lista para el 2024, pero diría que es más probable para el 2028”, calculó Torres.