Los dos principales exponentes del voleibol boricua, Aury Cruz y Héctor ‘Picky’ Soto, hablaron este lunes sobre el dinero que hicieron como jugadores profesionales y dejaron evidenciado que las mujeres ganan más que los varones en este deporte.

Cruz y Soto fueron los invitados del podcast Volley Junkies, que modera el asistente boricua de la universidad de Eastern Illinois, Manolo Concepción, y que continúa cada día de esta semana a la 1:00 p.m.

Y ambos entraron en un intercambio de cifras que llegó a la dígito de $21, por juego.

Cruz, quien está activa y quien debutó en el Voleibol Superior en el 1998 con las Llaneras de Toa Baja, fue la primera en contestar cuánto dinero comenzó ganando y reveló que su primer contrato fue de $1,200.

Soto respondió con la historia de su primer cobro como profesional, allá para el 1995, cuando jugaba con los Bucaneros de su natal Arroyo.

“Con mucho respeto al apoderado (Cruz) porque era otra época. Recuerdo que fue en Mayagüez. Para esa época se pagaba después de los juegos en efectivo. Me dio un sobre con un billete de $20, y un billete de $1. Tenía 16 años”, contó Soto, de 41 años.

Soto le comentó a Cruz, en ánimo de colegas, que es conocido que las mujeres ganan más dinero que los varones en el Voleibol Superior. Cruz defendió el lado femenino al argumentar que en el caso de los varones, estos compensan al poder jugar también en el exterior considerando la fecha del torneo isleño, lo que les permite jugar tanto en la liga local como en alguna en la que sean firmados como refuerzos. En el caso de las féminas, su torneo en Puerto Rico coincide con la acción de la mayoría de las ligas internacionales, por lo que o juegan en el exterior o en Puerto Rico. Pocas logran jugar en ambas.

Cruz y Soto salieron de Puerto Rico para convertirse en los máximos exponentes del voleibol boricua. Cruz se convirtió en una jugadora estable en Europa, buscada por los equipos contendores a la Liga de Campeones de Europa.

Soto se convirtió en una estrella, Mejor Anotador del Campeonato Mundial 2006 y de la Copa del Mundo 2007. Fue figura central de la Selección Nacional que llegó a estar clasificada octava en el mundo y que ganó tres medallas de oro consecutivas en Juegos Centroamericanos y del Caribe.

Gracias a sus desempeños, Cruz y Soto mejoraron sustancialmente los contratos que recibieron en el exterior, así como en Puerto Rico.

Soto reveló que su contrato mayor en el profesionalismo superó los $400,000. Y detalló que cobró ese nivel de cifra durante tres años, mientras jugó en las temporadas de Rusia y Corea. También vio acción en Túnez, Bélgica, Italia y Japón.

Soto jugó en el exterior desde el 2000 al 2010 y dijo que gracias a que guardó dinero puede disfrutar la vida de sus dos hijos porque no necesita un trabajo a tiempo completo ahora mismo.

Por su parte, Cruz no reveló de cuánto fue su contrato mayor, aunque rió cuando Soto le recordó que las atletas ganan más que los varones en el voleibol.

“Aury se queda calladita porque ella sabe que tuvo contratos mejores que los míos”, dijo Soto.

Cruz, quien está activa en el Voleibol Superior, vio acción en 15 temporadas en el exterior, ocho de esas en Italia. También jugó en España, Corea, y Azerbaiyán.