Pelegrín Vargas, hijo, se estaba preparando para una práctica de los Caribes de San Sebastián cuando se enteró de que la temporada de la Liga de Voleibol Superior Masculino (LVSM) había sido paralizada.

Los campeones defensores tenían programada una última sesión de entrenamiento el jueves, a las 7:30 p.m., antes de su juego inaugural el viernes por la noche en el Coliseo Luis Aymat Cardona ante los Gigantes de Adjuntas.

Vargas, hijo, desconocía por qué se había suspendido el torneo y, como el resto de sus compañeros, se dirigió al hogar de los Caribes en busca de respuestas.

Se fue enterando de los motivos detrás del aplazamiento de la campaña horas después, como la mayoría del país. A 24 horas de la noticia que sacudió al voleibol puertorriqueño, seguía sin creer lo que había sucedido.

“Yo dentro de mí no quiero aceptarlo. No quiero aceptar que esto va a pasar. Mi mente está en negación, pero me estoy dando cuenta de que es la realidad. Y, ¿qué yo puedo hacer? No puedo hacer nada”, dijo Vargas, hijo, en una entrevista con Primera Hora.

La Federación Puertorriqueña de Voleibol (FPV) notificó el jueves en la noche que la temporada de la LVSM no se jugaría en verano, apenas horas antes del partido inaugural entre los Cafeteros de Yauco y los Plataneros de Corozal en el Coliseo Juan C. Berríos, en Barranquitas.

Más tarde, el organismo federativo anunció que el torneo había sido pospuesto para el 20 de octubre tras una reunión con los ocho apoderados, a pesar de tener un permiso de Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Voleibol (Norceca).

Esto se debe a que la Federación Internacional de Voleibol (FIVB), además de prohibir la contratación de refuerzos, ordenó que no se pueden llevar a cabo competencias de clubes desde el 15 de mayo hasta el 15 de octubre, para no afectar los compromisos de las selecciones nacionales durante el verano.

Puerto Rico tiene en agenda competir en el Norceca Final Four, del 23 al 28 de julio; la Copa Panamericana, del 24 de agosto al 1 de septiembre; y el Norceca Final Six, del 4 al 13 de octubre. Sin embargo, la directriz de la FIVB afecta a los 27 jugadores que fueron incluidos en la preselección nacional, así como al cuerpo técnico y al resto del personal involucrado en el programa.

En el caso de Pelegrín, no podrá buscar el tricampeonato con San Sebastián. El capitán del Pepino ya había llegado a un acuerdo contractual para volver a España con el club Río Duero Voley Soria, cuya campaña también inicia en octubre. Originalmente, el torneo local iba a terminar, a más tardar, el 30 de septiembre.

Pelegrín Vargas, hijo, de los Caribes de San Sebastián, durante el séptimo juego de la final 2024 de la LVSM contra los Mets de Guaynabo.
Pelegrín Vargas, hijo, de los Caribes de San Sebastián, durante el séptimo juego de la final 2024 de la LVSM contra los Mets de Guaynabo. (Jorge A Ramirez Portela)

“Yo acordé un contrato en España, considerando que iba a estar aquí, así que ya contaba con mi salario de aquí. Incluso, dejé mi trabajo en Indiana por estar aquí. Ahora no hay liga y ya me mudé de Indiana, así que no puedo regresar porque ya no tengo casa allá”, compartió el estelar atacante de los Caribes, quien trabajó en Estados Unidos durante los pasados meses como entrenador del club de voleibol de niñas Gym Rats.

“Yo era uno de los asistentes del club y me fui para allá cuando se acabó la temporada pasada. Estuve trabajando todo este tiempo. Lo dejé, pero ahora que vuelvo me quedé sin uno y sin el otro”, abundó.

Pelegrín no es el único que enfrenta contratiempos con el retraso de la campaña. Johann León Pérez, también jugador de San Sebastián, era la única fuente de ingreso en su familia y planificaba ayudar a su abuela en Cuba con los gastos de una operación que se realizó hace unos días para tratar un nódulo canceroso.

Adicional a eso, su papá, el entrenador Juan León, también está delicado de salud debido a un linfoma y debe costear su tratamiento.

“(Juan León) iba a pagar sus tratamientos en gran parte con los ingresos de su hijo, que es jugador de los Caribes. Que tú le digas de un día para otro, que ese sustento ya no va a estar es bien complicado. Eso es muy difícil. ¿Qué se supone que Johann haga? Puede buscarse otro trabajo, pero él estaba contando con eso, hizo planes para eso, entrenó para eso y fue a las prácticas para eso. Por eso es que esta situación es tan difícil”, sostuvo.

El entrenador cubano Juan Francisco León Paredes dirigió a los Caribes de San Sebastián al campeonato en 2023. Tomó las riendas del sexteto en los últimos juegos de la final.
El entrenador cubano Juan Francisco León Paredes dirigió a los Caribes de San Sebastián al campeonato en 2023. Tomó las riendas del sexteto en los últimos juegos de la final. (Suministrada)

Vargas, hijo, fue claro en que su intención no era señalar a nadie por la situación. Su único deseo es que se envíe una carta a quienes ordenaron el retraso del torneo, con la esperanza de que se reconsidere la decisión. No obstante, es inevitable la paralización de la campaña en verano.

FIVB amenazó con suspensiones de tres años

Jamille Torres, dirigente del Equipo Nacional y los Changos de Naranjito, explicó a este medio que la FIVB no solo prohibió el uso de refuerzos en la LVSM, sino que también amenazó con suspender por tres años a la FPV. La liga se hubiera jugado sin aval y los jugadores, árbitros y entrenadores habrían estado expuestos a multas y suspensiones de tres años o más.

“Hacer una carta no es una opción viable. Ellos (FIVB) ayer (jueves) tuvieron una reunión con César Trabanco (presidente de la FPV) y hablaron del tema. Ahí fue que se pospuso el torneo y les notificaron las posibles sanciones si se decidía jugar… No podemos jugar sin refuerzo porque no tenemos aval. Si jugamos sin aval, los entrenadores, los jugadores y hasta nuestras selecciones nacionales de categorías menores se hubiesen visto afectadas porque nos podían multar. Nos amenazaron con darnos tres años de suspensión a todos los jugadores, entrenadores y árbitros”, comentó Torres.

“Esto nos pone en una situación bien difícil. Sé que los jugadores pierden sus ingresos. Yo no estaba de acuerdo con jugar en verano, pero nosotros sabemos que nuestros voleibolistas no ganan como los del BSN. Ganan mucho menos dinero que esos jugadores y como único ellos pueden compensar una cosa con la otra es teniendo un doble salario jugando aquí y allá”, abundó.

Jamille Torres, dirigente de la Selección Nacional de voleibol masculino, al centro durante un juego.
Jamille Torres, dirigente de la Selección Nacional de voleibol masculino, al centro durante un juego. (Heriberto Rosario / FPV )

Torres contó que el viernes le informó al refuerzo de los Changos, Colton Cowell, que debía regresar a su país porque no se iba a celebrar el torneo. Una situación que lamenta porque llevaba más de un mes preparando al sexteto naranjiteño para una campaña, que apuntaba a ser de las más reñidas en los últimos años.

“Yo me estaba preparando para competir por un campeonato, no para cumplir. Todos sabemos que para poder hacer eso hay que practicar cuatro o cinco veces a la semana. Es duro porque nosotros estamos tratando de empujar esta liga y que tenga la exposición que se merece. Jugar aquí es difícil y estamos tratando de que vengan buenos atletas a Puerto Rico a rozar con nuestros jugadores para que el torneo suba de nivel. Pasan cosas como estas y, no solo nos deja un mal sabor, sino que nos desacredita como liga”, manifestó el técnico de los máximos campeones de la LVSM.

“Suerte tuve yo que pude hablar con nuestro refuerzo y el muchacho entendió que no está en nuestras manos. A mí me entristece muchísimo porque el torneo iba a ser buenísimo. 21 jugadores de los que se convocaron para la Selección Nacional iban a estar activos en el torneo. Eso casi nunca pasa”, añadió.

Será una temporada distinta

Al igual que San Sebastián con la baja de Pelegrín, Torres confirmó que Naranjito no contará con Omar Hoyos y Arturo Iglesias. Ambos también se irán a jugar a España. Hoyos acompañará al capitán del Pepino en Río Duero Voley Soria, mientras que Iglesias firmó con el Club Voleibol Guaguas.

“Aquí no perdió San Sebastián ni Naranjito, aquí perdió el voleibol”, lamentó el estratega.

“Todo esto es sumamente triste. No existe una solución para arreglar esta situación hoy. La única opción es jugar el 20 de octubre. Pues vamos a poner el esfuerzo para que el 20 de octubre se dé el mejor torneo de los últimos 10 años. Esa debe ser la mentalidad ahora mismo y no seguir señalando. Yo veo a mucha gente señalando y tratando de hacer que alguien quede mal. Eso es lo peor que podemos hacer ahora mismo”, opinó.

En los últimos cinco años, la LVSM comenzó en agosto, pero su estreno se había adelantado con el permiso de Norceca. Ahora habrá que esperar hasta octubre para ver acción en el voleibol local, aunque muchas de sus estrellas no estarán disponibles debido a compromisos en el exterior. Esto cambiará el panorama por completo.

“Esta liga prometía tener seis, siete hasta ocho equipos que podían competir en cualquier noche. Ahora de seguro no estarán los refuerzos que habían contratado, aunque puede que alguno vuelva, no hay nada escrito en piedra. Pero yo sé de algunos, como el que nosotros teníamos en San Sebastián, que ya tienen contratos en otras ligas”, expresó Vargas, hijo.

Pese a esta situación, la LVSM dio luz verde para que en la venidera campaña las ocho franquicias puedan firmar a un máximo de dos refuerzos.

Torres, de otro lado, dijo que el Equipo Nacional practicará este mes los lunes, miércoles y viernes de cara al Norceca Final Four. También realizarán semanalmente entrenamientos grupales y aumentarán los días de práctica a medida que se acerque el 23 de julio, fecha en la que arranca el certamen.