Las y los voleibolistas del País recibieron el sábado la noticia de las cancelaciones de sus respectivos torneos de Superior con sentimientos de sorpresa y resignación.

Los dos torneos, el femenino que se puso en pausa en marzo, y el masculino que iba a arrancar en mayo, fueron cancelados el sábado, en sendas reuniones de sus juntas de apoderados.

Es la segunda cancelación de ambos torneos en los últimos tres años. En el 2018 los dos campeonatos fueron también eliminados por causa de las consecuencias que sufrió el País por el paso del huracán María en el 2017.

Esta vez, afectados por la pandemia del coronavirus, había cierta esperanza de que el torneo Superior Femenino reanudara en algún momento al final del verano, pero parece que el ambiente era falso porque la votación de los apoderados a favor de cancelar el torneo fue contundente: 6 a favor y 1 en contra.

La estelar jugadora de las Amazonas de Trujillo Alto, Aury Cruz, fue una de las sorprendidas, aunque se había declarado que estaba a favor de la cancelación, como habían hecho todas las ligas de Europa.

“Me sorprendió”, dijo Cruz. “Había alternativas de que se podría jugar, pero las votaciones fueron totalmente diferente”.

La Liga Superior Femenina trabajaba, incluso, un acuerdo con la televisión (WAPA Deportes) para producir la reanudación del torneo. Algunos apoderados se pronunciaron en las redes sociales a favor de la reanudación días antes de su cancelación.

El único voto a favor de la reanudación fue del apoderado de las Llaneras de Toa Baja, Marcos Martínez.

El presidente de la Federación Puertorriqueño de Voleibol, César Trabanco, dijo que la seguridad fue la razón principal para que los apoderados votaran en contra.

Mientras, los apoderados de la Liga Superior Masculina votaron 6-2 en contra de comenzar el torneo por razones de seguridad y ausencia de recursos económicos, dijo Trabanco.

El esquina Pablo Guzmán, esperaba esa decisión.

“No estaba en control de nosotros. Primero vienen las vidas y no podemos unirnos para jugar. No es culpa de nadie”, dijo.

Otra razón que dieron ambas ligas es la incertidumbre sobre si el gobierno autorizará en algún momento la práctica de deportes de conjunto con fanáticos.