El cotizado actor Bratt Pitt se ha lanzado al mundo de los zombis con la película World War Z. El filme ha convertido el centro de la ciudad escocesa de Glasgow en escenario de una ficticia guerra mundial que enfrenta a los humanos contra muertos vivientes.

La vida, por lo general calmada, de Glasgow, se ha visto trastocada con la presencia de una de las parejas más famosas de Hollywood, los actores Brad Pitt y Angelina Jolie, acompañados de sus seis hijos Vivienne, Shiloh, Maddox, Knox, Zahara y Pax.

La pareja y sus asistentes llegaron este pasado martes a Glasgow a bordo de un tren privado de nueve vagones y 450 plazas alquilado por Pitt, que durante las dos semanas de rodaje en la ciudad escocesa reside junto a su familia en una lujosa mansión en Bishopton.

Pitt es el protagonista y productor de la película World War Z, basada en una novela de terror de Max Brooks y en la que encarna a un empleado de Naciones Unidas que recorre el mundo para tratar de detener una epidemia de zombis que comenzó en China.

La historia original narra cómo los muertos vivientes se extienden por el mundo después de que el Gobierno chino es incapaz de contener una infección de origen desconocido que convierte a la gente en zombis.