Hay quien se da un sorbo de café y se transporta a un lugar. El café también trae consigo una serie de recuerdos de momentos o de personas con las que se compartió esa tradicional bebida que calienta el paladar en las mañanas (y a cualquier hora del día).

Para la chef Marilyn, el café es familia, pero más que eso, es la patria.

“A mí me hicieron acercamientos para hacer otros productos, otras marcas, lo cual no he dicho que no, pero mío, que dijera, ‘esto es mío’, ‘lo hice yo’, ‘lo parí yo’, ‘lo voy a hacer yo’, el café; porque significa para mí lo que somos, puertorriqueños”, afirmó la experta en gastronomía.

Su vínculo con el café no es casual ni caprichoso, tiene su historia. Desde que era bebé aprendió a tomarlo en biberón, porque así se lo servían las dos abuelas. “En honor a ellas, que fueron las que, básicamente, me criaron, quería hacer algo con el tema del café, y siempre en mis post (en las redes sociales), pues yo ponía, ‘quien te quiere, te da café', porque siempre hay algo que nos une por ese tema”, compartió.

Mi aficción por el café siempre fue bien grande. Mis dos abuelas me daban el café en el biberón, las gotitas para pintar las botellas”

-Chef Marilyn sobre el origen de Café Catalina

El anhelo de emprender en la industria cafetalera lo mantuvo a lo largo de su carrera hasta hace tres años, cuando su primo, Jean Paul Giuliani, propietario de la Finca El Sol de Joaquín, le dio el visto bueno para encaminar su producto exclusivo, cuyo mayor atributo es ser 100% puro de Puerto Rico, tanto la cosecha como la elaboración.

“Nunca pensé que el café iba a estar tan pegao’ como ahora, que se ve con tantos coffee shops, y qué bueno; de hecho, me fui a coger unas clases de barismo en Hacienda Moraica con Erica Reyes, y ahí descubrí que no sabía nada del café”, confesó la conductora del segmento “Sazón al día” del programa “Hoy día Puerto Rico” (Telemundo). “Aun siendo chef, descubrí que no sabía nada, que lo que sabía muy bien era bebérmelo y cuidao’, porque no sabía ni colarlo bien”.

Café Catalina se cultiva, se recoge, se tuesta y se muele (excepto el que se vende granos) entre el verdor montañoso de Jayuya y pueblos limítrofes. Actualmente se distribuye en cerca de 50 supermercados y a través del portal www.cafecatalinapr.com. El café en grano es el de mayor venta.

Si no te bebes ese chorrito de café por la mañana, no eres puertorriqueño”

-Chef Marilyn, ahora propietaria de la marca Café Catalina

Si interesante para ella ha sido el redescubrimiento en torno al café, más aún el poder integrarlo a su especialidad, que son los platos con el sello puertorriqueño. “En la cocina lo he ido integrando, porque Café Catalina tiene unos sabores que los puedes añadir y llegar a otra cosa y despierta la creatividad del chef y, pues, lo veo en adobos de carnes, que es excelente para ello; lo veo en té con lo que se despulpa de la semilla; en las festividades de Navidad, en los coquitos; y en los postres, y aunque no soy pastelera de profesión, sí me gusta mucho ese camino y cada día perfecciono más el tiramisú. Pero, en esencia, el café me ha llevado a poder ir viendo y empezar a bebérmelo como no me lo bebía. Hoy día mi café es sin azúcar, detalló Marilyn Del Carmen López Laureano.

Las expectativas con esta marca van desde ampliar la distribución a nivel local hasta establecer el coffee shop. Pero, igual de importante es para su creadora, es la consistencia en la calidad que procura llevar en cada empaque. “Encontramos la receta perfecta de lo que es Café Catalina y se ha mantenido ahí. No quiero hacerme millonaria con Café Catalina, pero sí quiero que Catalina tenga el nombre que tiene y que cuando usted abra esa bolsa siempre esté (el sabor) garantizado”, puntualizó.