El resultado de los tres finalistas de la competencia de canto “Objetivo fama: la despedida” era predecible.

Como Primera Hora vaticinó hace semanas, Hannaní Peraza (Arecibo), Fabián Torres (Orocovis) y José Rubén Ruiz (Río Grande) aseguraron el sábado en el Centro de Bellas Artes de Guaynabo su pase a la gala final, que ocurrirá el próximo domingo, 17 de mayo.  José Aníbal Maldonado, de Villalba, quedó eliminado a un paso de entrar al selecto trío.

A juzgar por los gritos del público que abarrotó el teatro, Fabián parece ser el favorito.  Y aunque la posibilidad de su triunfo es tangible, hay que destacar que José Rubén puede darle una dura batalla.

Y es que, incluyendo también a Hannaní, la noche estuvo inundada de ejecuciones sobresalientes que validaron la acertada selección de los finalistas.

Además de los tres habituales integrantes del jurado Roberto Sueiro (abogado), Hilda Ramos (cantante de ópera) y Abraham (intérprete de música sacra), se unió como invitada la cantante española nacida en Argentina Chenoa, quien se dio a conocer en la prueba de talento de la Madre Patria “Operación triunfo”.

La cantante también tuvo una intervención musical en directo con su éxito “Absurda Cenicienta”.

Durante el primer segmento de la decimocuarta y penúltima gala, animada por la cantante Gisselle, los semifinalistas cantaron un tema nuevo para ellos antes de conocerse los resultados de la votación telefónica.

“Celestial”, “bravísimo” y “soberbio” para Fabián                                              

El primero en cantar fue Fabián al ritmo de “Si te vas”, éxito salsero de Marc Anthony.  Recibió una ovación de pie mientras que Sueiro lo vio “un poquito frío al principio… pero de ahí en adelante estuviste espectacular.  Has dado los registros más altos en términos de las voces masculinas”.  El abogado le dio el esperado “¡soberbio!”.

Ramos lo encontró “bravísimo… todo un tenor” mientras que Abraham resaltó sus notas agudas y le regaló su “¡celestial!”.  A Chenoa le llamó la atención la “honestidad” del orocoveño.

Tremenda evaluación para Hannaní

El segundo turno le correspondió a Hannaní, quien entonó “Ámame una vez más” de Amanda Miguel.  Hilda Ramos le dijo que es “una de las candidatas que debe permanecer”, y Abraham, por su parte, la felicitó por lograr los agudos.

Chenoa quedó “impactada” con su “voz potente” y Sueiro mencionó que “la resonancia de tu voz en esta competencia es la mejor”. “Incólume rendición”, concluyó.

José Aníbal vino después y vocalizó “Mentira” de Gilberto Santa Rosa. 

El artista sacro opinó que ha sido “el de más progreso en la competencia” a la vez que la española lo vio experimentado a pesar de su corta edad, aspecto en el que coincidió el abogado. La cantante de ópera confesó que lo ha “empezado a respetar como un futuro artista” y lo evaluó como “bravísimo”.

José Rubén se echó al jurado en el bolsillo

El último turno de la primera ronda fue de José Rubén, quien se lució con “Me va a extrañar”, de Ricardo Montaner.  Durante la interpretación del novio de la eliminada Amesis Román se recreó una boda como parte de los elementos de producción.

Su intensa rendición le valió una ovación de pie. Chenoa resaltó su “nobleza” y “voz hermosa”, aunque cree que tiene que soltarse más.  Sueiro, sin pensarlo dos veces, le otorgó el “¡soberbio!” y lo observó como un “profesional”. “Es la mejor interpretación hasta este momento en esta competencia”, concluyó mientras que discrepó de la opinión de la española en cuanto a la soltura.

Hilda Ramos también quedó sorprendida y Abraham le brindó su famoso “¡celestial!”.

Primera finalista: Hannaní

Para el segundo segmento, luego de ser llamados, los tres finalistas repitieron una melodía de su paso por “Objetivo fama: la despedida”. El cuarteto de jueces volvió a evaluar a los chicos.

Gisselle extrajo de un sobre blanco la tarjeta con el nombre de Hannaní, quien, emocionada, se convirtió en la primera en entrar a la final de “Objetivo fama: la despedida”.  Ejecutó de modo impresionante “No habrá nada”, de Whitney Houston.

Ni el “¡soberbio!” de Sueiro ni el “¡celestial!” de Abraham se hicieron esperar. Chenoa e Hilda quedaron igual de satisfechas. 

Segundo finalista: Fabián

La tensión aumentaba cuando Gisselle anunció a Fabián como el segundo finalista de “Objetivo fama: la despedida”. El extrovertido joven de Orocovis entonó “Ángel”, de Jon Secada.  Recibió una masiva ovación de pie.

Hilda Ramos estaba tan emocionada que se quedó sin palabras hasta que dijo que “cantar así en vivo es muy difícil. No solamente tú amas la música, con interpretaciones como esa tú respetas la música”. 

Abraham repitió su “¡celestial!” mientras que Chenoa consideró que “el público tiene muy buen gusto”.

“Has sido a través de toda esta competencia el más consistente y probablemente eres el más carismático y lo más importante es la humildad que proyectas”, dijo emocionado Sueiro sin olvidar el obligado “¡soberbio!”.

Tercer finalista: José Rubén

Sólo quedaban José Rubén y José Aníbal. El chico de Río Grande se convirtió en el último elegido. Luego de señalar hacia arriba en gesto de agradecimiento a Dios, corrió emocionado a abrazar a Fabián y Hannaní.

Mientras, el muchacho de Villalba reaccionó tranquilo y abandonó la carrera con la frente en alto. 

El tercer finalista entonó “Esta ausencia” de David Bisbal, curiosamente ante la presencia de Chenoa, ex novia del ídolo español, quien lució tranquila mientras escuchaba la canción.

Abraham lo vio “increíble y espectacular” y, otra vez, le dio el “¡celestial!”.

Chenoa dijo que “muy pocos chicos pueden cantar” como él, mientras que Sueiro le dio las “gracias” de permitirle escucharlo cantar.  Dijo que quedó “atolondrado” y también le regaló otro “¡soberbio!”.

Hilda Ramos evaluó como “perfección” el sonido de su voz.  “Eres uno de los talentos que debe ganar esta competencia”, dijo.

Para la apertura de la gala, los cuatro semifinalistas doblaron el ya gastado tema de Diego Torres “Color esperanza” junto con un nutrido cuerpo de baile. Aunque fue eliminado, José Aníbal se despidió con “Bésame”, de Ricardo Montaner. Se bajó del escenario para compartir con el público presente en el Centro de Bellas Artes de Guaynabo.