Sorpresiva salida de Víctor de "Objetivo fama: La despedida"

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 16 años.
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La competencia de talento “Objetivo fama: la despedida” (Univisión Puerto Rico) tomó un giro impredecible con la eliminación de Víctor Robles (Cataño), ocurrida el sábado durante la duodécima gala en el Centro de Bellas Artes de Guaynabo.
Esto contrastó fuertemente con lo que muchos esperaban fuera la salida del ponceño Marko Castillo, quien sorpresivamente aún sigue en carrera.
Sin embargo, el camino hacia la final continúa ahora más definido para los concursantes Hannaní Peraza (Arecibo), Fabián Torres (Orocovis) y José Rubén Ruiz (Río Grande), quienes han demostrado a lo largo de tres meses ser los más fuertes competidores de la sexta y última temporada del reality show. Completó el cuadro de cinco semifinalistas José Aníbal Maldonado (Villalba).
Aunque, a juzgar por los vítores de la audiencia que asistió al teatro, el orocoveño podría estar muy cerca de cargar con el triunfo que lo llevaría a grabar su primer discompacto como solista.
La sorpresa de la noche fue la aparición del cantante y actor mexicano Fernando Allende, quien este año no pudo fungir como jurado por compromisos profesionales pero se unió como invitado al panel de jueces junto con el abogado Roberto Sueiro, la cantante de ópera Hilda Ramos y el artista sacro Abraham.
Fabián arrasó una vez más
A lo largo de la velada, que inició a las 8:30 de la noche, la animadora Gisselle extrajo de sobres blancos los nombres de los cinco semifinalistas que continuarían en carrera. El orden en que fueron llamados no necesariamente correspondió al lugar que obtuvieron los competidores en la votación telefónica.
El primer escaño correspondió a Fabián, quien cantó “Por mujeres como tú”, éxito de Tito Rojas.
Se llevó una ovación de pie, y es que definitivamente, el género tropical le cae como anillo al dedo al muchacho.
Allende realzó su voz “rara” y “no artificial”. Sueiro opinó que hizo “de limón, limonada” y que “dio cátedra” al superar al intérprete original. Con otro “¡soberbio!” concluyó el abogado su evaluación. Abraham lo encontró como un artista “versátil”, a la vez que Ramos destacó que el chico hizo una buena ejecución.
A medias José Aníbal
El segundo en unirse al reducido círculo fue José Aníbal. El jovencito interpretó la bachata “Ven tú”, famosa en la voz de Domenic Marte. “Creo que hiciste un buen trabajo en términos del dominio del género… ahora bien no sé si ese género se presta para este tipo de competencia para tratar de impresionar”, comentó Sueiro.
Hilda Ramos resaltó el “progreso” de José Aníbal en la competencia y le dijo que “demuestre siempre su talento de acuerdo a sus posibilidades”. Abraham se hizo eco de las palabras de la cantante, mientras que el mexicano lo vio “cómodo” en escena.
Hannaní: “celestial”, “bravísima” y “soberbia”
La semifinalista número tres fue Hannaní, única mujer que se mantiene en la competencia, quien se escuchó magistral con la balada “Abrázame fuerte”, de la boricua Lourdes Robles, junto con un coro cuya presencia en la tarima no tuvo mucho sentido.
Abraham le dio el codiciado “celestial”. Para Allende su voz es la “más radial”, mientras que Sueiro le dijo satisfecho que “quería seguir escuchándote”. También se llevó el “soberbio” del licenciado y el adjetivo de “bravísima” de la boca de la experimentada Ramos.
José Rubén airoso con controvertido tema
El cuarto en asegurar su permanencia en la casa-estudio una semana más fue José Rubén y vocalizó la controvertida canción “El gran varón” de Willie Colón. Lo acompañó en el escenario un travestido que bailó y dramatizó la letra del tema.
“Nadie se merece ser rechazado, todos somos iguales ante los ojos de Dios”, declaró el joven al culminar su intervención, ganándose la ovación del público.
“¡Una canción para la historia!”, exclamó Fernando Allende, mientras que Sueiro le dijo que “lo que acabas de hacer en el escenario es impresionante, te convertiste en historiador… acabas de entrar en un trance a este público”. El implacable jurado se puso de pie y le entregó el “¡soberbio!”, como era de esperarse.
Hilda Ramos, de modo exagerado, comparó la ejecución de José Rubén con el fallecido tenor italiano Luciano Pavarotti en cuanto a la dramatización de las diversas voces narrativas de la canción, mientras que Abraham también quedó asombrado y le dio su “celestial”.
El último en clasificar fue Marko, resultando en la inesperada salida de Víctor, quien reaccionó tranquilo al saber que obtuvo la menor cantidad de votos y abrazó a su compañero mientras mantuvo su acostumbrada sonrisa.
El ponceño, por su parte, entonó “Escúchame”, de Joseph Fonseca, con una orquesta de adorno al fondo del escenario. Realizó, posiblemente, su mejor ejecución en toda la competencia. Sin embargo, Sueiro no lo vio al “nivel de los otros competidores”. Ramos, igualmente, opinó que su “falta de expresión” lo tiene atrás, comentario que, otra vez, repitió Abraham. Allende observó “problemas de afinación”.
Aunque fue eliminado, Víctor tuvo la oportunidad de despedirse del público de “Objetivo fama: la despedida” al cantar el éxito de Ricky Martin “Fuego de noche, nieve de día”.
No intercambiaron palabras Melina y Gisselle
La apertura de la duodécima gala de “Objetivo fama: la despedida” estuvo a cargo de la merenguera Melina León, quien mostró sus bien formadas piernas y utilizó pista de voz para presentar su sencillo “No seas cobarde”.
La escasa interacción de la “Mujer Liberada” con la animadora Gisselle, al punto de que no intercambiaron palabras y mantuvieron una distancia prudente luego de la participación musical de Melina, echó leña al fuego sobre la sonada rivalidad entre ambas merengueras. La animadora ni siquiera entrevistó a su colega, cuando suele hacerlo con los demás artistas invitados.
También participaron los reguetoneros Alexis & Fido. Se emitió una intervención pregrabada del baladista español Alex Ubago.
En la gala del próximo sábado, el grupo se reducirá a cuatro, camino a la final del domingo, 17 de mayo.