Las puertas del histórico Cine Roosevelt cerrarán este jueves, pero quizás no de forma definitiva como anunciaron la pasada semana los propietarios debido a la crisis que enfrenta esa industria del entretenimiento a causa de la pandemia del COVID-19.

Los dueños, Cecile Solá y su esposo Milton Garland, confirmaron este domingo que, tras la publicación el jueves del cierre del cine a partir del 23 de septiembre, han recibido varios acercamientos con el interés de que no sea un cierre permanente, sino una “pausa”.

“Hay personas interesadas en que el cine no se cierre, de que se continúe dándole vida”, dijo Solá por vía telefónica. “Ha habido acercamientos de personas que lamentan mucho perder un espacio como ése en este momento y que sea un cierre definitivo”, continuó.

El Cine Roosevelt sí tiene una esperanza”

-Cecile Solá, propietaria de Cine Roosevelt

Solá prefirió no detallar por parte de quién o quienes se han dado los acercamientos considerando que son “prematuros”.

Primera Hora confirmó con Antonio Morales, director del Departamento de Arte y Cultura del Municipio de San Juan, que el alcalde de la capital, Miguel Romero, es uno de los interesados en adquirir el cine.

“El alcalde está tomando muy en consideración la posibilidad de poder comprarlo”, dijo Morales. “Todavía se están evaluando números, pero él lo está tomando muy en serio”, puntualizó.

Morales agregó, tanto su departamento como el Departamento de Desarrollo Económico de San Juan, están haciendo la evaluación.

“Los dueños quieren que sea algo relevante al tema y por esa línea estamos buscando todas las alternativas”, indicó.

Sorprendidos con las reacciones

Solá, al igual que su esposo, se han sorprendido con las reacciones tristeza y asombro que han percibido por parte del público que se ha acercado al cine en la urbanización Roosevelt, para lamentar el cierre, como de quienes se han expresado a través de las redes sociales.

“Esa respuesta ha sido grata”, comentó. La asistencia al cine, sin embargo, se ha mantenido más o menos igual en los últimos días. No ha habido un alza a partir de la noticia del cierre.

La propietaria, hija de Mario Solá Ramírez, quien compró el cine en 1978, manifestó su comprensión ante la respuesta cautelosa que han mostrado las personas de asistir a espacios cerrados de entretenimiento ante la amaneza de contagio del COVID-19, y que ha redundado en el posible cierre del negocio.

“Esperamos darle buenas noticias más adelante”, concluyó.