Protagonistas: Kristen Stewart, Robert Pattinson, Billy Burke, Ashley Greene

Director: Catherine Hardwicke

Esté preparado para este fin de semana en el cine. Si usted ha estado despegado de los intereses de los adolescentes, quizás no anticipe el fenómeno que veremos en las salas. Pero bastará advertirle que la serie de libros que comienzan con “Twilight” es lo más caliente en la literatura juvenil desde que “Harry Potter” comenzó a estudiar en “Hogwarts”.

“Twilight” nos presenta la historia de “Isabella Swan” (o simplemente “Bella”), una joven de 17 años que narra sus aventuras cuando cambia de escuela al mudarse junto a su padre. Aunque la chica es de carácter tímido, logra crear mucho interés entre los estudiantes. En cambio, el misterioso “Edward Cullen” muestra un rechazo inexplicable hacia ella.

La razón es complicada: “Edward” se siente atraído por ella, y prefiere evitar cualquier posibilidad de relación, ya que “Edward” tiene 108 años de edad. Pero la diferencia de edades no es el problema, ya que el centenario estudiante aparenta 17 años. El asunto es que “Edward” es un vampiro.

Eventualmente, el amor es más fuerte que cualquier peligro, y la relación coge fuerza. La familia de “Edward”, que ha logrado contener el impulso de consumir sangre humana gracias a una estricta dieta de sangre animal, ayuda a defenderlos de la amenaza que recae sobre ellos.

Resulta que han llegado tres vampiros de otro clan que no apoyan semejante trato con mortales corrientes. Así que se empeñan en la sangre de “Bella”, y la joven pareja debe luchar no solamente por su amor, sino por sus vidas.

La obra fue escrita por Stephanie Meyer, una autora de muy poca experiencia que asegura que la historia le llegó en un sueño. Meyer dice haber escrito sus libros mientras escuchaba como inspiración a las bandas My Chemical Romance, Muse, Blue October, Linkin Park y Coldplay.