En tiempos recientes, Walt Disney Studios ha tenido múltiples retos en distintas divisiones de su compañía: la baja en calidad de las cintas de Marvel Studios, cambios drásticos en las versiones live-action de sus historias clásicas y, sorprendentemente, poco interés por sus proyectos animados.

Así que al entrar a la sala de proyección tenía altas esperanzas de que Wish, el nuevo filme de la casa de Mickey, que estrena hoy en Puerto Rico, no me defraudara y me permitiera traer buenas noticias a los fans que, como yo, quieren que la compañía dé signos de vida.

Me alegró mucho el poder disfrutar de una película que se siente llena de vida, pero que al mismo tiempo no tiene miedo de llevar un mensaje impactante y relevante.

Ciertamente, Wish es una celebración de los 100 años de Disney como compañía, algo que funciona mayormente a través de la cinta pero en ocasiones se pronuncia demasiado. Aún así, si eres fan del contenido que produce esta compañía tal vez no te molestará mucho las múltiples referencias, directas e indirectas, que hacen en el proyecto a películas anteriores.

Wish nos trae la historia de “Asha”, una joven que vive felizmente en el reino de Rosas junto a su madre y su abuelo. Este reino es gobernado por un hechicero llamado “Magnífico”, quien tiene el poder de otorgarle los deseos más preciados de los ciudadanos de Rosas, siempre y cuando él considere que esos deseos son “dignos” de conceder. El conocimiento de este hecho será tan solo el comienzo de los problemas para “Asha” y sus amigos, quienes se embarcan en una aventura para liberar los deseos de sus seres queridos.

La animación de Wish es hermosa. La texturas en el diseño de los personajes, las tonalidades acuarelas y los paisajes le dan un toque verdaderamente único a este proyecto. Mientras lo observaba sentí que estaba viendo una pintura que había cobrado vida en la pantalla grande. Los números musicales también son bastante pegajosos, divertidos y algunos de ellos son increíblemente inspiradores (sospecho desde ya que habrá nominación al Oscar para una de esas canciones en específico).

Las actuaciones que proporcionan Ariana DeBose y Chris Pine en esta cinta son muy buenas, pero siento que es Pine quien se destaca dándole voz al “rey Magnífico”. El actor captura muy bien los aspectos vocales que caracterizan a un villano de Disney y me recordó a personajes como “Jafar” de Aladdin y “Úrsula” de Little Mermaid.

Siento que Wish será una de esas cintas animadas de Disney que recordaré por siempre ya que me impresionó que trajeran un mensaje de revolución en contra de liderazgo corrupto o con ideales dictatoriales, mensaje que no es usual en lo absoluto para proyectos como este de parte del estudio.

A pesar de que es un tema fuerte, el equipo creativo lo manejó con excelencia para no dejar un mal sabor en la boca de las audiencias, sino más bien inspirar y motivarnos a buscar lo mejor de nosotros mismos.

Así que te animo a que no te pierdas Wish en las salas de cines junto a tus seres queridos.