Al actor Braulio Castillo y a la actriz Yamaris Latorre se les pregunta sobre la complejidad del texto que da vida a la obra “¡Ay, Carmela!” y no saben si reír o llorar. La comedia original del dramaturgo español José Sanchis Sinisterra los tiene dejando a un lado rutinas diarias, como puede ser ir al gimnasio, para ocupar el mayor tiempo posible al estudio de sus personajes.

“Noooo, esto lo pueden hacer los nenes de kinder”, saltó a decir el actor más en broma que en serio. Seguido miró a su compañera de escena y ambos, al unísono, fingieron que lloraban, evidenciando el reto que tienen entre manos.

Para cada una de estas figuras del arte nacional cualquier trabajo representa una entrega, un compromiso, que les permite confirmar esa pasión que cada uno siente por su profesión, sin embargo esta pieza los ha sorprendido con su complejidad, pues se da en el marco histórico de la Guerra Civil española en la década de 1930, les requiere de llevar un acento individual representativo del pueblo o provincia originario de sus personajes y porque, además, como dice Braulio, hacer comedia es cosa seria.

“El texto te va a dar todos los elementos para que el público encuentre su humor, pero si lo hacemos astracanamente, por traer a colación algo que predomina en este País, pues no va para ninguna parte el texto, porque está escrito muy inteligentemente y requiere esa entrega”, abundó el intérprete de teatro, cine y televisión.

“Es un texto que lo puedes mover a distintos géneros -sostuvo Yamaris- lo puedes analizar desde diferentes perspectivas y vas a encontrarle ángulos dramáticos, vas a encontrarle ángulos históricos, hasta de absurdo, así que es un texto complejo, rico, y al mismo tiempo, como el autor tiene un humor muy particular, pues se van a divertir, la gente se lo va a disfrutar”.

A mí nada en la vida me provoca ese sentir que me provoca cuando salgo a escena, nada”

-Braulio Castillo, actor

“¡Ay Carmela!” se presentó en las tablas locales hace unos 20 años y a partir de hoy y hasta el domingo se presenta como obra de cierre del Festival de la Comedia en el Teatro Braulio Castillo en Bayamón. El texto ubica a los artistas como otra pareja de actores, “Paulino” y “Carmela”, cómicos, pobres y cansados, a cargo de una revista de variedades de tercera categoría. En medio de la Guerra Civil Española comente un error que los priva de la libertad.

Son entonces obligados por un teniente italiano a realizar una parodia en contra de la República para los brigadistas que serían asesinados. “Carmela”, en su viveza y férrea defensa de su País, altera la parodia y se suma a lista de fusilados, causando una pena embriagante a su compañero.

“El artista nunca claudica”, afirmó, por su parte, Braulio. “Por más díficil que tenga las cosas, siempre busca una manera de que prevalezca lo que hace, porque su rol es comunicar y llevar y está en las venas y lo dice el personaje, ella lleva el arte en las venas desde que nació, desde chiquita, entonces ellos son eso, son entregados al arte, lo que pasa es que cayeron en esta situación de las líneas enemigas”.

“Carmela” asume un riesgo por respeto a su País que le costó la vida y, según la actriz, los cuestionamientos sociales de su personaje, no son ajenos a ella. “Son los propios cuestionamientos que nos hacemos”, dijo. “Si vemos los personajes como un simbolismo, pueden ser vistos desde la represión, el miedo, la complacencia, el sometimiento o la búsqueda de esa libertad y de esa dignidad y de esa expresión del ser, así que hay cuestionamientos de todo tipo, pero para mí, cada vez que hago una obra representa conocerme más a mí misma, abrir espacios distintos como comunicadora y esta es una de esas piezas que te cuestiona, te reta y te transforma al final”.

Yo me encuentro (en el teatro), siento que estoy en casa. Donde más agradezco es cuando voy a entrar a escena porque es un miedo enorme, pero a la misma vez es el privilegio de poder ser quien va a comunicar toda esta información”

-Yamaris Latorre, actriz

Los boletos para esta puesta en escena están a la venta en PRticket.