Rescatar y revivir la talla de santos de vestir en la cultura puertorriqueña es el norte del Colectivo de Mujeres Talladoras de Santos, que presenta la exposición Santos de vestir: renace la historia, que se exhibe en la antigua casa alcaldía de Carolina.

La práctica de tallar santos de vestir ya casi no existe en Puerto Rico. Por eso, el grupo de 20 mujeres se dio a la tarea de aprender el arte para poder difundirla y preservarla.

“La diferencia de la talla de santos de vestir a la talla de santos que comúnmente conocemos es que los santos de vestir no están completamente tallados, sino que tienen unas partes que sobresalen y los cubre un vestido hecho de acuerdo al tipo de santo que se vaya a tallar”, dijo la talladora Carmen González Quiñones, miembro de la agrupación.

González Quiñones, quien también es investigadora de la talla de santos, explicó que esta tradición artesanal proviene de la época en que los europeos comenzaron a cristianizar a los colonizados.

“Los santos de vestir se usaron mucho en los altares caseros, así como en las procesiones que todavía se hacen en las iglesias”, indicó. Por su parte, la talladora Norma Vega Rodríguez mencionó que es durante la celebración del Viernes Santo que es más común ver un santo de vestir. “Lo que se usa en esa procesión es un santo de vestir. Uno de los santos más comunes es la Virgen de la Dolorosa”, señaló.

El Niño Jesús, San Antonio, San Francisco de Asís y el patrón de la Ciudad de los Gigantes, San Fernando, forman parte de la exhibición.

La figura de San Fernando fue creada por la artesana Gloria López y mide unas seis pulgadas de alto, además, atrae todas las miradas de quienes visitan la exposición. “Gloria hizo un trabajo excelente; la espada es de madera al igual que los broches de la capa y la corona”, explicó Vega Rodríguez.

Su belleza está en el esqueleto, pero más aún en su vestimenta, porque ahí es que tú presentas todos los atributos de un santo en específico”, señaló González Quiñones, quien es talladora desde el 1996. Detalles como el color y los accesorios, como las coronas, aureolas, espadas, entre otros, se van incorporando a las piezas.

Los santos de vestir estarán expuestos en Carolina hasta el 15 de enero de 2012.