Un espacio alternativo, sin elementos propios de la sala teatral. En la tarima habrá una puesta en escena en blanco y negro. Los actores estarán pintados de blanco. También habrá una trama enriquecida de personajes caricaturescos, épocas del cine y características de las novelas detectivescas.

Todo lo anterior se combinará en la producción Historia de horror casi en blanco y negro, que subirá todos los jueves de junio, a partir de hoy, a las 8:30 de la noche, en el local La Respuesta, en Santurce.

Y, a juzgar por las descripciones del dramaturgo Joaquín Octavio y el actor principal José Eugenio Hernández, la audiencia se enfrentará a una experiencia inusual.

Como si se tratara de un filme, con características del cine mudo y el cine negro en su narrativa y estética, el público tendrá ante sí una propuesta similar a una película, pero con los actores en vivo.

“Es una obra que combina estéticas distintas, por lo que puede disfrutarla el cinéfilo, el teatrero y el que le gusten las artes plásticas y la música. Es una representación teatral de una película extraña que combina el horror, el film noir, el cine mudo, en función de la comedia”, describió el director y dramaturgo Joaquín Octavio sobre la propuesta en la que el “Detective Clásico” (Hernández) intentará descifrar un crimen.

“El valor mayor de la obra es la estética porque es bien diferente. Nunca había visto una obra en blanco y negro, aparte de que Joaquín escribe muy bien. Es un tipo de comedia de humor negro, que no es usual en Puerto Rico, donde vemos más el chiste fácil, la explotación sexual y la mofa. Aquí, la gente apreciará otro tipo de humor”, añadió el actor y profesor universitario de teatro y francés, Hernández.

Octavio presentó este trabajo en el 2005 en el teatro Yerba Bruja, en Río Piedras, y en el 2006, en la sala Raúl Juliá del Museo de Arte de Puerto Rico, en Santurce. Pero quienes vivieron esas experiencias tendrán otra distinta, pues el autor hizo unas modificaciones al texto.

En esta ocasión, Octavio adaptó 14 personajes a cinco actores. Marisé “Tata” Álvarez, Julio Morales, Lidy Paoly López y Jessica Rodríguez asumieron el desafío de desdoblarse. Mientras, Hernández retomó el personaje del “Detective Clásico” que había guardado en algún rincón de su memoria.

“Como están pintados de blanco, sus gestos no se pueden repetir. Tuvieron el reto de buscar diferencias y transformarse en cuestión de minutos. El trabajo de los actores ha sido extraordinario”, resaltó el guionista (Fracturas múltiples), quien integró un personaje que no formó parte de las representaciones anteriores y se había quedado en un borrador.

“Esta vez, la obra ha madurado y ha crecido. Es otra cosa”, agregó Hernández.