Hace unos dias unos tiktokers irrumpieron en la mansión abandonada de Luis Miguel para ver cómo vivía, ahora otro grupo de jóvenes irrumpieron en la casa que Mario Moreno “Cantinflas” tenía en el puerto guerrerense y el estado en el que se encuentra la propiedad es peor a comparación del cantante de “La incondicional”.

Los jóvenes Rolando Astudillo y Luis Mojica fueron los intrépidos en irrumpir el terreno del cual mostraron sólo la parte de la marina que poseía el actor de “Ahí está del detalle”.

Las imágenes que subieron a sus redes sociales fueron tomadas, primero por un dron, el cual muestra desde arriba el terreno de la mansión de Cantinflas para después casi a ras del agua entrar al minipuerto que tenía, el cual está acompañado por una alberca con un tobogán. Todo esto en un estado de deterioro avanzado.

De las cosas que más llama la atención es la escultura de gran tamaño del personaje del llamado Mimo de México, la cual está recargada en un farol con la clásica pose de espera de Cantinflas, cruzado de brazos y en una mano un cigarro.

También mostraron algunos de lo muros de la mansión, el cual contienen pinturas abandonadas o murales de peces y sirenas.

¿Quién fue Cantinflas?

Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes, nombre completo del también llamado el “Charles Chaplin Mexicano”, era el sexto de los ocho hijos del empleado postal Pedro Moreno Esquivel y su esposa María de la Soledad “Cholita” Reyes Guízar, quienes vivieron en varias casas de las colonias Tepito y Guerrero. Sus hermanos se llamaban Pedro, José, Catalina, Esperanza, Roberto, Enrique y Eduardo.

Su situación económica era difícil y por ello Mario, de apenas 16 años se alistó en el Ejército, ingresó a la 3ª. Compañía de Infantería y fue remitido al 20 Batallón, destacado en Chihuahua; al enterarse, su padre escribió una carta a las Fuerzas Armadas en la que informa que su hijo mintió en su edad, pues tenía solamente 16 años en lugar de los 21 que señala el reglamento.

A su regreso Mario intentó convertirse en boxeador, se preparó en un gimnasio de la colonia Guerrero y se presentó con el apodo de “El Chato” Moreno, pero en el primer combate lo noquearon.

Entonces decidió trabajar en una de las tantas carpas que ofrecían espectáculos de variedades en la ciudad, donde se empleó como payaso, acróbata y bailarín; sus primeras apariciones las hizo con el rostro maquillado de blanco y un sombrero de paja.

En 1931 creó al personaje “Polito”, un payaso de carpas que presentaba en el Salón Sotelo de Azcapotzalco que luego interpretó en la Carpa Valentina, en el barrio de Tacuba.

Conoció al actor y luego guionista lituano Estanislao Shilinsky Bachanska, quien ya trabajaba allí y con quien hizo dupla: uno como el cómico irreverente y bobo y el otro como el actor listo y serio. Shilinsky, quien también se convirtió en concuño de Moreno Reyes al casarse con Olga, la hermana de Valentina, ayudó al cómico mexicano a crear el personaje que le dio fama mundial.

“Cantinflas” fue inspirado en un barrendero “borrachito” de nombre Olegario que el mimo conoció cuando trabajaba en el Teatro Follies Berger, en la zona de Garibaldi; como el típico “pelado o lépero” de los años 30, lo mismo daba vida a un boxeador, taxista y lustrador de calzado que a un bailarín.

El cómico británico Charles Chaplin calificó entonces a “Cantinflas” como “el mejor comediante del mundo” y Mario fue escogido por Michael Todd para interpretar a “Passepartout” (conocido en Latinoamérica como “Picaporte”) en la espectacular producción “La vuelta al mundo en 80 días”, filmada en 1956.

Este trabajo significó su debut en el mercado de habla inglesa en Hollywood y por su trabajo, Moreno Reyes fue galardonado con el Globo de Oro en la categoría de Mejor Actor de Comedia o Musical, en tanto que la cinta obtuvo el Oscar como Mejor Película.

Otros proyectos que el también llamado “Mimo de la Garbardina” realizó en el extranjero fueron “Pepe”, película de 1960 también realizada en Estados Unidos; así como “Don Quijote cabalga de nuevo”, dirigido en España en 1972.

En México destacó también con las cintas “El siete machos”, “El bombero atómico”, “Si yo fuera diputado”, “El señor fotógrafo”, “Abajo el telón” y “Ama a tu prójimo”, que se hicieron entre 1950 y 1958, además de “El bolero de Raquel”, elaborada en 1956 y que fue su primera película en color.

Así como “Sube y baja” (1958), “El analfabeto” (1960), “El extra” (1962), “Entrega inmediata” (1963), “El padrecito” (1965), “El señor doctor” (1965), “Su excelencia” (1966), “Por mis pistolas” (1968), “Un Quijote sin mancha” (1969) y “El profe” (1971), por mencionar algunas.