Lo podrán acusar de loco o de que está obsesionado con su caso legal contra la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública, pero el productor Ángel “Junior” Torrealba está claro en que ningún comentario de este tipo lo hará claudicar de lo que él cree que ha sido una “injusticia”.

El productor volvió a hablar ayer de su pleito legal porque está “cansado” de que nadie le haga caso a sus reclamos, a la vez que insistió en que está siendo perseguido políticamente y que teme por su vida.

Hace cinco años, Torrealba inició un proceso en los tribunales contra la estación pública de radio y televisión por los derechos de autor del programa Puerto Rico al son del Caribe, el cual alega que le pertenece. En el 2010 el productor mantuvo una huelga de hambre por 22 días frente al canal en Hato Rey, en protesta por no haberse resuelto su pleito legal. Este suceso trajo un sinfín de diferencias entre el productor y el pasado presidente de la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública Israel “Ray” Cruz.

La grabación de una llamada telefónica que supuestamente hizo Cruz a Torrealba para ofrecerle una cantidad de dinero y transar el caso fue una de las últimas tramas de este pleito al que se le siguen sumando tentáculos.

Cruz demandó en noviembre a Torrealba por “grabar ilegalmente una llamada privada”. Ese mismo mes se halló causa para juicio contra el productor, pero luego de cinco vistas a las que Cruz no se presentó, el caso se desestimó, según indicó ayer Torrealba en entrevista con Primera Hora.

El productor insistió en que este último suceso demuestra que Ray Cruz mintió consistentemente durante el proceso y no descartó tomar alguna acción legal contra el ex presidente de la estación pública. Agregó que el que Cruz ya no esté frente al canal no lo exime de su responsabilidad, ya que realizó declaraciones juradas que, según entiende, están plagadas de mentiras.

“Ante la jueza, en el tribunal, dijo que nunca me había llamado y aquí está este listado de llamadas que demuestra que me llamó de su teléfono celular el 4 de noviembre de 2010, cuando ya había empezado la huelga. Después dijo que yo había grabado una conversación telefónica cuando eso era falso”, dijo Torrealba a la vez que mostraba la lista de llamadas.

“Nunca se presentó (a la vista) y luego fue a un programa de televisión a decir que me pedía perdón, que pasaba la página, que no sólo a mí, sino a todos los que le habían hecho daño. Oye, si realmente quería pedir perdón por qué no fue el primer día de la vista y dijo: 'Esto no va para ningún lado, y retiraba los cargos’”, agregó el productor, quien precisó que decidió hablar ahora porque estaba esperando a que se resolviera esa demanda en su contra.

Torrealba manifestó que pronto comenzarán a aflorar las verdades en el tribunal y que “alguien tendrá que ir preso”.

“Ahí hay perjurio, aquí hay declaraciones juradas, aquí mintieron y llevan cuatro años tapando esto (el caso)”, abundó.

Teme por su vida

El productor enfatizó ayer que teme por su vida y que anda con seguridad privada constantemente por varias situaciones que ha vivido.

Torrealba mostró varias querellas que ha hecho ante la Policía de Puerto Rico, específicamente, durante los meses de noviembre y diciembre de 2011. En una de ellas se informa sobre la incautación de una bolsa de marihuana y de dos cilindros con cocaína. El productor dijo que estas sustancias aparecieron en la bicicleta de su hijo de seis años de edad, a las afueras de su residencia, aunque eso no se establece en el informe.

“Para fabricarme un caso, dejaron eso en la bicicleta de mi hijo. Eso pasó en un fin de semana que salí para San Juan con mis amistades y cuando salgo de mi casa veo que está la bicicleta de mi hijo amarrada a la goma de un carro con todas esas cosas y ahí fue que se llamó la Policía”, indicó.

Otra de las querellas tiene fecha de diciembre de 2011 y en ella se establece que Torrealba alegó que estaba siendo perseguido por una guagua blanca y que le dejaron una foto suya en el parabrisas de su carro en un momento que paró a comprar comida rápida.

“Fui a la Policía de Puerto Rico para que me intervinieran el teléfono porque he recibido llamadas amenazantes; a mí se me han parado con pistolas al lado de mi carro... Ya esto llegó a un límite donde yo temo por mi seguridad full”, insistió.

Torrealba entiende que todas estas situaciones son estrategias para que se rinda y concluya el caso, pero enfatizó en que no se dará por vencido.

“No voy a claudicar y te lo digo por mi hijo. Yo me fui de la huelga de hambre por la seguridad y por la salud, pero estaría dispuesto a volver a la huelga allí en el canal o donde sea. Nunca en la vida me voy a rendir porque cuando tú tienes la verdad, tú vas hasta el fin del mundo”, concluyó.

Persecución política

La próxima vista del caso de Torrealba contra la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública se llevará a cabo el 8 de mayo. Ese día se verá una demanda de cobro que presentó la estación contra el productor, alegando que debe entregar un dinero que cobró indebidamente por la venta de su programa Puerto Rico al son del Caribe.

Torrealba indicó ayer que esta acción se trata de un nuevo montaje y que tiene todos los documentos para demostrar que la estación pública miente.

“Esto es una persecución política y eso se ve en las costuras porque yo no postulo al Gobierno actual. Tú ves que lo que hay aquí es maldad”, apuntó el productor.