Atesora los sacrificios de su madre

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 17 años.
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Si hay algo que atesora en su alma la modelo Lynette Chico es el sacrificio que su madre Evelyn Muñoz hizo por ella y sus hermanos para que nunca les faltará nada y obtuvieran además una buena educación.
Lynette Chico no pudo contener el llanto al expresar su admiración y agradecimiento por todo lo que su mamá ha hecho por ella.
Esa cualidad de ser sentimental, por cierto, la heredó de su procreadora que al igual que ella también se emocionó durante esta entrevista y estalló en llanto al narrar lo cuesta arriba que fue sacar hacia adelante a sus vástagos por la limitación económica.
Además, Evelyn Muñoz, que es maestra de inglés, enviudó cuando su famosa hija tenía apenas siete años de edad, porque a su esposo lo asesinaron en un asalto.
Por eso se las tuvo que ingeniar para criarla junto a su hermana menor Melissa sin que le faltara nada. Luego, de otra relación, tuvo a su hijo menor Josuel, hoy de 22 años de edad.
Entre sollozos, la artista, de 31 años de edad, revela que cuando “papi murió” (hace una pausa), en casa no hubo riquezas como tal, pero a mí y a mi hermana no nos faltó nada. Mami tenía dos trabajos y no nos descuidaba en nada”.
“Siempre que había un party teníamos todo nuevo. Nunca olvido el día que mami nos trajo de Venezuela a mí y a mi hermana un montón de bikinis”, dice sonriente.
Seguido, Evelyn Muñoz agrega que “yo lo hacía porque las hacía feliz. Ellas sabían que todo lo que yo les daba era un sacrificio”.
Ya con el llanto controlado, la también animadora señala que “nosotras íbamos en guagua pública para las tiendas, hasta que mami se compró el carro”.
En cuanto a lo entregada y trabajadora que es su madre siente haber emulado lo fajona de ella, a quien además describe como una mujer buena y luchadora.
A raíz de los valores inculcados, Lynette Chico asegura que “aprendí que si yo quiero algo lo obtengo por mí misma, porque no tengo que envidiarle nada a nadie”.
“A mí nunca me faltó nada. Y fui a Disney de niña varias veces. Mami hacía prestámos para ir para allá. Mami ha sido madre y padre, y eso es digno de admirar”, detalla la egresada del colegio Santa Cruz en Trujillo Alto.
Siempre fue coqueta
Evelyn Muñoz, por su parte, describe a su hija como una persona humilde, de buenos sentimientos y que no es de ofender a nadie.
Su procreadora cuenta que su hija mayor fue coqueta desde chiquita. Le gustaba pararse frente al espejo, con un frasco de líquido de fregar en las manos, como si recreara un comercial.
“Yo esperaba que estudiara para ser diseñadora de moda, porque ella inventaba con la ropa”, narra la orgullosa madre.
Por eso no le sorprendió cuando Lynette Chico quiso entrar a la televisión, porque sabía que eso era lo que le gustaba.
Aunque la carrera de su hija, señala, “no es algo que la apoyé siempre, porque no me agrada que hablen de ella. Le temía a los bochinches y a los comentarios sobre ella”.
No le gusta la poca tela
El que su retoño utilice poca tela sobre su cuerpo y pose para calendarios, es algo que Evelyn Muñoz, confiesa, tampoco le agrada mucho.
Seguido, Lynette Chico comenta que tanto su procreadora como su abuela Angelita Noriega le pelean mucho porque ambas son conservadoras.
Sin embargo, su mentora siente orgullo cuando “camino por ahí y me hablan de ella por algo que hizo bien”.
Evelyn Muñoz señala que tanto Lynette como su otra hija Melissa siempre fueron habladoras en el salón de clases.
“Yo me enteraba de todo en la escuela”, dice entre risas.