Chiquito... ¡y sin complejos!

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 17 años.
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Luis Raúl se tripea su nariz, su poco (o ningún) cuello, pero nada peor para él que ser chiquito. Pero eso depende de dónde se pare. Al lado de varios jugadores de los Capitanes de Arecibo parece la mascota del equipo.
Su incomodidad con su estatura es tanta que no dice cuánto mide. Así que saque cuenta usted. El centro de los Capitanes, Osiris Ricardo, mide 7 pies, mientras que el comediante le pasa por poco de los codos.
El mismo jugador dice que tiene que dormir cruzado en una cama tamaño king. Luis Raúl, por su parte, hace un matre con dos almohadas largas (tamaño humano).
“El único complejo que me dio en la vida era que por qué los demás eran grandes y yo no. Y yo era bailarín, a mí me fascinaba salir a parisear y a vacilar, y las muchachas que pariseaban conmigo eran grandes y parecían que iban a las fiestas con su hermano chiquito”, recordó.
Su manera de, más o menos, lucir bien entre los demás era usar los zapatacones con pantalones campana o bell bottoms.
“En Ponce, cuando se puso de moda salir a disco partys, la tienda Tom McAnn tenía los mejores zapatacones y yo tenía toda la variedad de plataforma completa, de plataforma y tacón aparte, eran feos con cojo..., pero qué alto me veía”, contó.
Luis Raúl no tiene corazón deportivo, pero tuvo su tiempo de probarse en el canasto en juegos de media cancha “o lo que llamaban un 16”. “A la edad que tengo que me atreví venir a esta cancha con los Capitanes, que me han cargado al hombro, que no me zumbaron al canasto de milagro, y al que menos, le llego al codo, y todos tienen mucho menos de mi edad”, dijo de su encuentro con Osiris Ricardo, Keenan Jourdon, Mario Butler, Ángel Rosa Clemente y Raúl Rivera en la cancha Francisco “Pancho” Padilla en Arecibo.
“En general pienso que el latino no es tan grande, pero yo llegué tarde a la repartición... Ésta es mi estatura desde que dejé de ser feto. Esto fue lo más que mi madre pudo pujar”, sostuvo riéndose de sí mismo.
Son estos contrastes entre los altos y los más bajos los que tejerán su nuevo -y dizque último- espectáculo de stand up comedy “Chiquito, pero juguetón”, que continúa funciones este sábado, 26 de abril, y domingo 27, en el teatro Oliver, en Arecibo.
Lo de juguetón refiere al tema sexual, dice. “Descubro si en el público hay gente chiquita y juguetona, grandes y bobolones, y el público es maravilloso, porque me miente todo el tiempo”, advierte sobre a lo que se expone al asistir a verlo a alguno de los teatros en agenda.
Las más recientes incidencias políticas y los anuncios o publicidad de productos para aumentar la potencia sexual, son otros temas que aborda en su monólogo.
El creador de “Piquito” y “Tito Párpados” pausará por un tiempo todavía indefinido del género del stand up comedy para atender otros proyectos.
“Viene una propuesta que le estamos planteando a DirecTV, otra cosa que le planteamos a un canal y está en desarrollo la película de Raymond Arrieta conmigo”, menciona parcamente.
“Chiquito, pero juguetón” se presentará en Arecibo (26 y 27 de abril); Manatí (3 de mayo), y en Caguas (16 y 17 de mayo). Información de boletos en Ticket Center.