En Estados Unidos, esta semana entrante no solamente incluye la memorable fecha de viernes 13, en que todos nos puede salir mal; tambien el esperado estreno de la revitalización de la archifamosa película Friday the 13th con “Jason Voorhees” más espeluznante que nunca; sino que también es el lanzamiento de la secuencia de un videojuego tan esperado como tenebroso: F.E.A.R. 2: Project Origin (Xbox 360, PS3, Windows).

La primera instalación de F.E.A.R. (First Encounter Assault Recon) en 2005 tuvo unas reseñas muy buenas que le permitieron alargar su vida para las expansiones Extraction Point (2006) y Perseus Mandate (2007). El paquete F.E.A.R. Files no debe considerarse como una expansión aparte, dado a que consiste de ambas expansiones.

Para dejar las cosas claras, Project Origin es un FPS (First-Person Shooter) envuelto en una historia de horror; o sea, no es el típico “mira-monstruo-dispara-seguimos” al que estamos acostumbrados. El rico desenvolvimiento de una historia con sentido, que nos hace recordar una de estas producciones cinematográficas parapelos, ha sido uno, sino el más importante, elemento que mantuvo a los gamers buscando más de F.E.A.R.

Para mí, la trama del juego toma prestado un poco de varias cintas de horror, como El Exorcista, Carrie y recientemente, Mirrors. En el juego original, la niña “Alma” comienza a utilizar sus poderes psíquicos para desvanecer nuestra realidad, lo cual creímos se había detenido tras la destrucción de la ciudad donde ocurrió la acción.

Nada que ver…

Un escuadrón de la Delta Force son los protagonistas de esta secuela que comienza justo antes de finalizar la primera entrega. Este escuadrón militar entra en acción media hora antes de que toda la ciudad (no específica) explote como “siquitraque” y deben combatir fantasmas y entes raros antes de vérselas frente a frente a “Alma”.

Para los que jugaron la primera parte, sepan que mucho de los elementos y movimientos del mismo se conservan, por lo que no se tendrá que “reinventar la rueda” a la hora de controlar a los personajes. La inteligencia artificial de las criaturas que combatiremos, ha sido mejorada circunstancialmente, lo que significa que los combates con estas criaturas sobrenaturales no serán nada fácil (suena divertido).

De hecho, como dato curioso, hay toda una controversia por el uso del nombre, dado a que durante el desarrollo de la secuela, el estudio (Monolith) cambió de dueños (Warner Bros. Interactive). F.E.A.R. había sido publicada por Sierra (Vivendi Universal). El nuevo juego sólo se llamaría Project Origin por Vivendi haber conservado los derechos al nombre F.E.A.R.. Vivendi y Activision, tras su fusión en 2007, vendieron los derechos del nombre a Warner, por lo que el juego sale con su nombre original. Qué complicado, ¿verdad?

Project Origin a su vez, es el nombre escogido para la secuela tras un concurso llamado Name your Fear (Nombra tu miedo) en 2007.