Kim Kardashian es sinónimo de controversia y excentricidad. No hay día en que las redes sociales no estén hablando de ella y ahora, con justa razón.

Ya sabíamos que Kim era amante del comúnmente llamado “facial vampiro”, pero que medicamente se conoce como: PRP, plasma rico en plaquetas obtenido a partir de la extracción de sangre del propio paciente y su posterior centrifugado. Según los expertos es uno de los tratamientos de regeneración celular más eficaces para retrasar el envejecimiento cutáneo.

Además de eso, con todos los millones de dólares que suma a su cuenta personal, es fácil imaginar que ese es solo uno de los tantos tratamientos a los que se somete la famosa de 41 años de edad incluyendo dietas express. Pero, lo que le dijo al New York Times, durante una entrevista, es lo último que cualquier persona en su sano juicio diría.

“Intentaría cualquier cosa. Te diré algo, si me dijeras que literalmente tengo que comer caca todos los días para verme más joven, podría hacerlo. Simplemente podría hacerlo”, expresó Kardashian justo en el momento en que está promocionando su nuevo negocio: su propia línea de belleza para cuidar la piel con un valor de $630 (el kit completo) con ingredientes como el ácido hialurónico, vitamina C, niacinamida, manteca de karité y escualeno.

Y, como adelantándose al aluvión de críticas que iba a generar en las redes sociales, expresó: “Muchas personas quieren actuar como si no les importara cómo se ven”.

De hecho, en la publicación en Instagram del NYT se leen comentarios: “¿Por qué siento que esto significa que ya lo ha hecho?” o “¿Cuánta caca es la pregunta?”.

Pero, pregunta seria: ¿tú llegarías a ese grado para mantenerte joven?