La actriz de 60 años Kirstie Alley ha perdido más de 90 libras desde su aparición en el programa 'Dancing with the Stars' el pasado año, y admite que su nueva figura le ha devuelto la confianza para encontrar de nuevo el amor y para ser más atrevida en la cama.

"¡No me gustaba mi imagen y no quería tener sexo grasiento!", aseguró.

"Lo que estoy buscando es enamorarme loca y profundamente. Por primera vez en mi vida, sé exactamente lo que quiero en un hombre. Quiero alguien que me cuide, que tenga coraje y sea valiente".

Kirstie - que estuvo casada con Bob Alley y Parker Stephenson - insiste en que para ella no había "nada positivo" en el hecho de tener sobrepeso, y asegura que ahora que usa una talla 40 tiene más energía que nunca.

"Tengo más energía de la que he tenido en toda mi vida. Mi cuerpo se había vuelto muy débil. No había nada positivo en el hecho de estar gorda. Pero ahora siento que he vuelto a la normalidad. He entrado en el juego otra vez", añadió en una entrevista a la revista People.