La belleza física y espiritual era tan admirada en el galán Pedro Juan Figueroa que hasta los hombres lo reconocían ayer en sus tertulias mientras se proyectaban fotos suyas en una pantalla en la Funeraria Buxeda en Hato Rey, donde se celebró su velatorio.

Pero también se destacó lo buen padre que fue para sus hijas, Marluán, con quien trabajó en el Canal 24; Melanie, Marlene y de su pequeño Emilio, así como un “abuelo papá” para sus nietos. Igualmente se recordó lo amoroso que fue como hijo de doña Milagros Ortega y hermano de cuatro.

“Lo que quiero que se lleven de mi hermano es que que era una persona humilde, su humildad fue su éxito. Dicen que la persona muere cuando la olvidan, por favor nunca lo olviden”, dijo Humberto Figueroa uno de sus hermanos.

Pedro Juan falleció el viernes a los 66 años a causa de cáncer en el páncreas. Sus hijas revelaron que la discreción con la que se manejó su enfermedad fue a petición del actor. 

“El cáncer a papi lo deterioró demasiado en muy poco tiempo y él no quería que lo vieran así, quería que lo recordaran como él era, un hombre bello y alegre… Papi era otra cosa. Él siempre estaba para el pueblo, nunca decía que no a nada, siempre estaba para el pueblo, nunca decía que no a nada, era el mejor padre, adoraba a sus nietos, de quien fue como un papá para los nenes de Marluán, porque el papá de ellos murió”, expresó Melanie.

El artista, que será cremado hoy, fue despedido con himnos de amor por el pastor y excantante dominicano Puchi García y en medio de aplausos. Muchos de sus colegas estuvieron en la funeraria para darle su último adiós, como el actor y hoy abogado Raúl Rosado.

“Sabía de su enfermedad desde el año pasado, pero Pedro se cerró en los últimos meses. Estoy sumamente triste. Fuimos amigos por más de 35 años, en la buenas y en las malas. Siempre estaré muy agradecido de lo bueno que fue conmigo, lo admiré mucho”.

Por su parte, el comediante Adrían García recordó que la última vez que lo vio fue el año pasado, cuando filmaron la película Mi abuelo se quiere casar, que aún no ha estrenado.

El actor José Ángel Rodríguez contó que conoció a Pedro a principios de los 80 en una obra. “Las muchachas que ensayaban con nosotros pedían permiso para ir al baño y no era otra cosa que para pasar por donde estaba Pedro y verlo porque era un Adonis. Le tuve que decir que se pusiera una careta para que las muchachas pudieran seguir ensayando”, recordó. 

Su hija Marluán reveló ayer que como consecuencia de un fuego que se desató en la casa donde vivían en 1999, la familia perdió todo el material de la historia actoral de su padre, por lo que pidió a quienes tengan revistas, afiches y todo lo que se haya publicado sobre el actor antes de ese año y tengan a bien compartirlo, pueden hacerlo ya sea en copia o en original a su correo, marluanfigueroa@gmail.com.

La cuenta del FirstBank que se abrió para ayudar a la familia a cubrir los gastos del tratamiento del actor se mantendrá abierta pues aún quedan muchos pagos pendientes hacer.