Locura con su galán Shanira Blanco
Abre las puertas de su hogar y nos habla del pequeño Mateo

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 10 años.
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Shanira Blanco no se queja. Vivió la adolescencia que quiso, cumplió su sueño de participar en un certamen de belleza y, mucho antes de cumplir 30 años, ya era toda una empresaria con su propia agencia de modelaje en Carolina. Conoció el amor después de alcanzar sus metas profesionales y unió su vida en matrimonio con el hombre de su vida.
Un tiempito después, quedó embarazada y ahora disfruta de una etapa maravillosa junto con su esposo, el doctor Augusto Ayala, y el primogénito de ambos, Mateo Augusto Ayala Blanco. Como si fuera poco, tuvo la dicha de encontrar trabajo en la televisión con un horario flexible que le permite compartir más con su bebé, quien actualmente tiene 8 meses.
“Siempre me decían que cuando yo tuviera hijos, mi prioridad iban a ser ellos, que iba a vivir para ellos y tenían toda la razón. Pero es que te nace vivir para ellos, te nace levantarte a las 3:00 de la madrugada, te place hacerlo… Es el amor, el amor de madre. Mi hijo es la bendición más grande que he tenido en mi vida. Dios lo sabe”, expresó emocionada Shanira Blanco, quien abrió las puertas de su hogar a Primera Hora desde donde compartió cómo se ha manejado para cumplir con su rol de madre y esposa, sin descuidar los múltiples compromisos que le exige el mundo del espectáculo.
Pero, ¿cómo lo hace? ¿Qué consejos le da otras mujeres con vidas similares?
“Primero que todo, con oración. Soy una mujer de fe y todas mis oraciones han llegado. Eso es importante. Aparte, hay que organizarse y ver de qué forma puedes trabajar en algo que te permita adelantar desde tu casa o que tenga un horario flexible. En mi caso, mis horarios, gracias a Dios, son flexibles en Mega TV, donde grabo el programa Paparazzi TV. Y, en muchas ocasiones, grabo algunas cosas desde mi casa antes de llegar al canal con un equipo móvil que compré. Eso me ayuda a adelantar bastante”, explicó la empresaria y animadora.
La mamá de Shanira, doña María Colón, es quien administra la agencia de modelaje de su hija, que lleva 9 años establecida. Y eso también ha sido de gran ayuda para la modelo.
“Rodearte de familiares y allegados que trabajen en equipo contigo es otra de las claves”, destacó la joven profesional, quien también tiene a su cargo la animación del sorteo de la lotería electrónica en el canal 6.
Shanira siempre ha sido muy laboriosa. Incluso antes de saber que estaba encinta, aparte de trabajar como imagen de varios productos y marcas comerciales y capitanear su propia agencia de modelaje, se desempeñaba como directora de la franquicia de Miss Mundo de Puerto Rico, puesto que decidió abandonar para dedicarse a su bebé.
Actualmente su esposo está inmerso en un proyecto de iniciativa comunitaria y se prepara para solicitar la residencia.
“Él quiere ser o siquiatra o médico de familia. Eso significa que Augusto estará los próximos tres años viviendo en un hospital lo que limita más nuestro tiempo juntos. Por eso hay que hacer las cosas como son y aprovechar esos tiempos de calidad”, apuntó la presentadora.
Desde que se convirtió en mamá, la animadora casi no tiene tiempo para nada, pero le encanta su nueva vida.
“Te cambia la vida. Antes te levantabas para hacerte un scrub, cosas que quizá suenen frívolas, pero la realidad es que dependes mucho de tu imagen para este trabajo. Ahora me levanto a cambiar pañales. Entro al canal como a las 2:00 de la tarde, y estoy con el bebé hasta esa hora, luego lo veo por la noche. Pero gracias a Dios me lo pude disfrutar full time los primeros cuatro meses”, mencionó la empresaria, quien cuenta con la asistencia de una nana durante el día para el cuido de Mateo.
Haber quedado embarazada y saber que ello conllevaría notables cambios físicos, como el aumento de peso, era algo que Shanira sabía que sucedería, pero eso nunca le quitó el sueño.
“Aumenté 46 libras y de esas solo me quedan cinco más que rebajar. Yo veía que otras mujeres de la televisión lograban llegar a su peso luego del embarazo así que sabía que yo podía lograrlo también”, aseveró Blanco, quien planifica tener otro bebé antes de los 40 años.
Las mañanas, en días de semana, son de mamá y bebé. Madre e hijo se abrazan, se aprietan, juegan y ella lo mece y lo consiente en un sillón que está ubicado en el cuarto del niño, decorado con superhéroes de Marvel y DC Comics en una idea del papá del niño.
La dueña de la academia Actitud no tiene vida con su pequeño Mateo Augusto. Está completamente enamorada del pequeño, a quien, según mencionó, lo comparan a cada rato con un muñeco Cabbage Patch, “pero en versión mejorada, ¡claro está!”, aclaró de inmediato. “¡Estoy enamorada de mi pequeño galán!”, reiteró la entrevistada.
A pesar de que Shanira es bien mamá, también es una esposa dedicada. “Por eso mi esposo y yo decidimos que cuando Mateo tuviera seis meses lo sacaríamos del cuarto y así fue. Al principio dormíamos con él en lo que se acostumbraba pero siempre lo tuvimos claro, que nosotros necesitábamos nuestro espacio. Se lo recomiendo a todas las mamás. Es saludable”, reiteró Shanira, quien comenzó su noviazgo con el doctor Augusto Ayala en el 2009 y se casó con él en verano del año pasado.
Un mes después de saber que estaba embarazada, el esposo de Blanco fue hospitalizado en condición cuidado por un mes y esa situación la afectó emocionalmente. No obstante la pareja se unió aún más y hoy día Shanira puede decir que su matrimonio está más sólido que nunca.