Nueva York. Un furioso Sean “Diddy” Combs exigió $20,000 a la madre de Casandra “Cassie” Ventura y amenazó con publicar videos sexuales explícitos de su novia de muchos años después de enterarse de que ella estaba saliendo con otra persona, testificó la madre este martes en el juicio por tráfico sexual contra el magnate del hip-hop.

Regina Ventura dijo que se sintió “físicamente enferma” cuando su hija le envió un correo electrónico a fines de 2011 informándole que Combs había amenazado con publicar dos videos explícitos de ella y con enviar a alguien a hacerle daño tanto a ella como al hombre con quien estaba saliendo, el rapero Kid Cudi.

“No entendía mucho de lo que decía. Lo de los videos sexuales me dejó helada”, declaró Ventura en la corte federal de Manhattan.

Ventura, oriunda de New London, Connecticut, dijo que luego recibió una exigencia directa de Combs por $20,000.

“Estaba enojado porque había gastado dinero en ella y luego se fue con otra persona”, declaró.

Se espera que Cudi, cuyo nombre real es Scott Mescudi, testifique antes del jueves.

Ventura dijo que recurrió a un préstamo con garantía hipotecaria para pagarle a Combs porque tenía “miedo por la seguridad de mi hija”. Días después, afirmó, el dinero fue devuelto y Cassie volvió a salir con Combs.

Ventura testificó por menos de media hora, en parte porque el abogado defensor Marc Agnifilo se negó a contrainterrogarla. Durante su testimonio, el jurado vio fotos de moretones en el cuerpo de Cassie, que Ventura afirmó fueron tomadas cuando su hija volvió a casa por Navidad en 2011.

Antes de que llegara el jurado este martes, Agnifilo intentó convencer al juez Arun Subramanian de que no se permitiera el testimonio, argumentando que era “pura y llanamente perjudicial”. El juez lo permitió, diciendo que las amenazas de publicar videos sexuales y de hacerle daño a Cassie constituían un posible caso de “extorsión”.

Agente federal describe el allanamiento a la casa de Combs

El jurado también vio partes de dos rifles AR-15 encontrados el año pasado durante un allanamiento a la mansión de Combs en Star Island, un exclusivo enclave de celebridades frente a Miami.

El agente de Seguridad Nacional Gerard Gannon testificó que los investigadores, en marzo de 2024, irrumpieron por la puerta de seguridad de Combs con un vehículo blindado y tenían equipos en botes cercanos. Además de las armas, encontraron tacones de 7 pulgadas y artículos que los fiscales dicen que Combs usaba en sus maratones sexuales, conocidos como “freak-offs”, como lencería, juguetes sexuales, aceite para bebés, lubricante y condones.

Este testimonio ocurrió en la segunda semana de un juicio que se prevé dure dos meses. Combs, de 55 años, se ha declarado inocente. Si es declarado culpable, el fundador de Bad Boy Records podría enfrentar entre 15 años y cadena perpetua.

Un exasistente describe cómo era trabajar para Combs

Más temprano este martes, David James, asistente personal de Combs entre 2007 y 2009, testificó que el trabajo parecía volverse cada vez más peligroso. Dijo que renunció cuando se dio cuenta de que Combs había puesto su vida en peligro al obligarlo a conducir un auto mientras él estaba en el asiento trasero con tres armas en su regazo.

James contó que a veces tenía que asegurarse de que las habitaciones de hotel donde se alojaba Combs bajo el alias “Frank Black” estuvieran surtidas con ciertos artículos personales del músico, como ropa interior limpia, un iPod, compota de manzana, vodka, aceite para bebés, Viagra y condones.

También hubo momentos sorprendentes, dijo James, como en 2008 cuando obedeció la orden de Combs de llevarle un iPod desde su casa en Miami a una habitación de hotel, donde abrió la puerta y vio a Cassie en la cama con una sábana blanca hasta el cuello y a un hombre desnudo y desconocido huyendo de la habitación.

En otra ocasión, dijo, Combs le mostró un video que grabó en una fiesta donde James aparecía bailando de forma exagerada y le dijo: “Ok. Me voy a quedar con este material por si alguna vez lo necesito”. James dijo que lo interpretó como una amenaza para mantenerlo bajo control.

Cassie testificó la semana pasada que Combs le advirtió que, si no hacía lo que él decía, publicaría videos de ella teniendo relaciones sexuales con acompañantes masculinos durante los “freak-offs”.

James también contó que fue obligado a tomar pruebas de detector de mentiras en dos ocasiones, cuando Combs sospechaba del robo de dinero en efectivo y un reloj.

Dijo que Combs consumía drogas casi todos los días, tomando Percocet durante el día y éxtasis por la noche. Al abastecer las habitaciones de hotel, dijo que las drogas venían en una bolsa entregada por el equipo de seguridad, incluyendo una píldora diseñada para parecerse al expresidente Barack Obama.

El momento en que vio las tres armas en el regazo de Combs ocurrió, según testificó, cuando estaba involucrado en un intento de Combs por confrontar a su rival de la industria musical Suge Knight en un restaurante de Los Ángeles en noviembre de 2008, un incidente sobre el cual Cassie también testificó. Dijo que renunció poco después.

“Estaba realmente alterado”, testificó James. “Fue la primera vez en que, siendo asistente del Sr. Combs, me di cuenta de que mi vida estaba en peligro.”

Más testimonios sobre los “freak-offs”

Antes del receso para el almuerzo del martes, testificó Sharay Hayes, un bailarín exótico conocido como “The Punisher”, quien afirmó que Combs y Cassie lo introdujeron al mundo de los “freak-offs”. Dijo que una mujer —Cassie usando un seudónimo— lo llamó y le dijo que era su cumpleaños y que su esposo había dicho que contratara a un bailarín.

Hayes dijo que llegó a una habitación de hotel en Manhattan esperando hacer un striptease para un pequeño grupo de personas, pero en su lugar encontró a la mujer que lo contrató —a quien luego supo que era Cassie— sola con un hombre desnudo que ocultaba su rostro con una tela tipo burka. Ese hombre, dijo, resultó ser Combs.

Hayes recordó haber visto botellas de aceite para bebés en tazones con agua y recibir un fajo de billetes por $800 en efectivo. Más tarde, luego de que Combs lo observara tener relaciones sexuales con Cassie, dijo que le entregaron $1,200 adicionales. Dijo que era fanático de Combs pero no se dio cuenta de que era él en la habitación hasta un encuentro posterior en otro hotel donde el mensaje en la pantalla del televisor decía: “Essex House le da la bienvenida al Sr. Sean Combs.”