Sabía que el cigarrillo era su peor enemigo, no obstante, nunca lo abandonó del todo y terminó apagándole la vida.

El comediante cubano -adoptado puertorriqueño- Leopoldo “Pucho” Fernández falleció a las 3:45 de la madrugada de hoy en el Hospital de área en Carolina. Tenía 81 años.

Su hijo, el paparazzo Leo Fernández informó vía telefónica a PRIMERA HORA que el recordado “Superpan” de la vieja comedia “El barrio cuatro calles” murió a causa de cáncer pulmonar.

“Continuaba fumando a escondidas y el cigarrillo lo mató, pobrecito”, expresó el paparazzo.

Pucho Fernández -cuya condición respiratoria se había agravado hace más de cuatro años cuando fue víctima de un asalto, a manos de tres hombres que lo agredieron- había sido trasladado hace seis semanas al hogar Shalom en Trujillo Alto tras no poder valerse por sí mismo. Fue por ello que la trabajadora social del Departamento de la Familia lo convenció de moverse de la égida La Merced al hogar para que estuviera mejor atendido.

El artista, nacido el 2 de septiembre de 1927, en La Habana, Cuba, será cremado, tal como lo deseó en vida y sus restos descansarán posteriormente en su patria.

Este jueves, a la 1:15 de la tarde, habrá un servicio religioso en Celestium en Carolina.

El paparazzo lamentó no haber tenido una relación más estrecha con su progenitor, a quien le sobreviven otros ocho hijos.

“Nosotros llevábamos una relación irregular, no era una relación típica de padre e hijo, pero sí había mucho cariño y yo estaba ahí para él”, afirmó Leo.

“Me hubiera gustado que la relación hubiera sido mejor, pero él vivía su vida a su manera y la disfrutaba, y a mí me complacía que él la disfrutara”, anotó.

Su carrera artística

Pucho Fernández, quien llegó a la Isla a inicios de la década del 50, inició en la televisión puertorriqueña como coordinador técnico del programa “El caso de la mujer asesinadita”. Trabajó al lado de la cantante Myrta Silva, Luis Vigoreaux y Gaspar Pumarejo, entre otras personalidades.

En su amplia trayectoria, apenas tuvo cinco personajes, entre éstos, “Machito Pichón” y “20/20”, "Pepón", "Superpan", "El Cabo Blanco".

Trabajó en "El show del mediodía" (canal 4), en “El Chisme Beauty” y “La Fonda de 2020”. Se destacó en "El barrio cuatro calles", junto a la cantante Lourdes Robles. En esa comedia, realizaba el papel de “Superpan”. A finales de los 80, laboró con la productora Lolyn Paz en “El Cuartel de la Risa”. Ya en los noventa participaba en el desaparecido “Hello Wapa”.