Cuando a partir de este jueves revise las carteleras de cine, recuerde el siguiente ruego de Luis Raúl: “cooperación, hermandad, compañerismo, solidaridad”.

Una vez haga ese ejercicio, quizás se decida por ver “Chiquito, pero juguetón: The Muvi”, primera película del comediante, cuya premier será hoy, martes, en las salas de Caribbean Cinemas de Plaza Guaynabo.

Allí los invitados desfilarán por una paja carpet, diseñada por Roberto Tosado. ¿Por qué un paja carpet? Sencillo. “Esto fue una paja mental que se hizo realidad”, explicó.

Luis Raúl no niega su ansiedad ante el estreno, pero a la vez confía en que el público llegará a verlo en esta versión de su más reciente espectáculo de stand up “Chiquito, pero juguetón” con la integración de varios de sus personajes.

“Mi idea es que, aunque yo estoy seis meses (en el teatro), hay gente que nunca en su vida me ha ido a ver, o no tienen $40 o $50 que cuesta la taquilla, o viven muy lejos, y mi idea es que toda esa gente maravillosa que me quisiera ver, puede venir con sus amigos, a lo que vale el cine”, expresó mientras se devoraba un pop corn pasado el mediodía de ayer, lunes, en los cines de Plaza Las Américas.

¿Te preocupa la crítica?

“Próxima pregunta”, respondió en broma para continuar un poco más en serio.

“Como vengo de teatro, he pasado por las manos, bolígrafo, lápiz, cuchillo, navaja, con todo el respeto, de todos los críticos, pero sí, no soy del grupo (de cine), hay que ser honesto, esto diría que es un evento y se le llama película porque llegó a la pantalla grande, pero yo le llamo más un evento, o un kocumental, como le llamó el director) Raúl Marchand, o un disparate de Rafo Muñiz, como dice el póster, así que es para que te rías, te diviertas en 86 minutos”, sostiene de la producción grabada en formato digital en el renovado Teatro La Perla en Ponce.

“Chiquito, pero juguetón: The Muvi” no es el primer trabajo que realiza el artista ponceño para el cine. Anteriormente apareció en los cortometrajes “East Side Story” y “Mambo Café”. Tampoco será el último, pues está decidido a repetirse en el séptimo arte, no importa si es una producción low budget como ésta, o a nivel de Hollywood.

“Es lo que me faltaba”, afirmó.

¿Algún pedido final?

“En plena Navidad, luego de un año intenso, saca 86 minutos para que te vayas a reír, porque es para bachatear”.