A pesar de que están casados desde hace 12 años y tienen una hija en común, el matrimonio de Salma Hayek con el millonario francés François-Henri Pinault todavía sigue siendo cuestionado. Cansada de que repitan que se casó por dinero y conveniencia, la actriz decidió alzar su voz y referirse por primera vez al tema.

“Cuando me casé con él todo el mundo dijo: ‘Es un matrimonio arreglado, ella se casó con él por dinero’, pero 15 años después estamos muy enamorados”, expresó durante una entrevista con el podcast Armchair Expert, conducido por Dax Shepard.

“En las imágenes no puedes vislumbrar la magia que hay en él, pero me ha hecho convertirme en una persona mucho mejor y crecer de una manera buena y saludable”, agregó.

Pinault, de 58 años, es un empresario del mundo de la moda, director ejecutivo de Kering, el grupo empresarial que controla marcas como Alexander McQueen, Yves Saint Laurent y Gucci. Según la revista Forbes, el hombre acumula una fortuna de 30 mil millones de dólares.

Intentando defender a su esposo y los comentarios que suelen hacer sobre él, Hayek lanzó una polémica frase. “Hay discriminación hacia los hombres ricos. Inmediatamente se piensa que porque alguien es rico puede que no sea una buena persona, que podría ser materialista, incluso estúpido, que no se merece lo que tiene o que para tener mucho dinero hizo el mal”, afirmó y agregó: “Existen todos esos prejuicios y los escuché, por desgracia”.

Durante la charla, la mexicana también admitió que no fue amor a primera vista, sino que fueron las actitudes de Pinault lo que terminaron enamorándola por completo. “Al principio no era mi tipo en absoluto. Llegué con ideas preconcebidas y él las deshizo todas”.

El pasado 19 de noviembre, a través de su cuenta de Instagram, Hayek le dedicó unas dulces palabras a su esposo, agradeciéndole por estar a su lado. “Nunca jamás, ni en mis sueños más grandes, me hubiese podido imaginar que iba a compartir mi vida con un hombre tan extraordinario y maravilloso. Tú eres nuestra fuerza, nuestra inspiración, nuestro hogar”, expresó en el mensaje, escrito en inglés y en francés.

El flechazo entre Salma y François se dio el 29 de abril de 2006 durante una cena de gala en Venecia, en la que ella era la invitada de honor. Tras esa cena, Pinault pidió que le consiguieran todas las películas de la mexicana, pues quería saber más sobre ella. El 14 de febrero de 2009 se casaron por civil, celebrando posteriormente una ceremonia religiosa dos meses después en Venecia, en el mismo Palazzo en que se conocieron.