Hace muchos años, casi una década, tuve el privilegio de probar un videojuego que marcó por siempre mi gusto por los juegos de estrategia. A pesar de que no era el primero en esta clasificación, su historia, sus unidades de batalla, los diálogos, la historia en general y los detalles fueron lo suficientemente buenos para dejar esa profunda huella hasta el día de hoy.

Ese juego se llama “StarCraft”, prácticamente, el papá de varios juegos posteriores que han utilizado su fórmula para llegar a tener meridiano éxito. El juego era una creación de Blizzard Entertainment, quien en su portfolio cuenta con varios de los juegos más populares de la historia, como “Diablo”, “Warcraft” y “World of Warcraft”, actualmente un fenómeno social sin precedente. “StarCraft” fue un éxito instantáneo y entre su versión original y su expansión, “StarCraft: Brood War”, se han vendido sobre nueve millones de copias en todo el mundo.

La historia que envuelve a “StarCraft” era buenísima, parte importante del éxito del juego. En los remotos confines de la galaxia, tres facciones, humanos descendientes de prisioneros que fueron exilados de la Tierra, los Protoss, quienes cuentan con recursos que los humanos o terrans' necesitan, y los Zerg, quienes invaden los mundos colonizados por los humanos y se encuentran en guerra con los Protoss.

Pues el pasado sábado, Blizzard anunció, nueve años después de aquel éxito, una segunda entrega de su legendario RTS (real-time strategy) “StarCraft”. Muchos quedamos locos con el anuncio y más aún, con el video promocional que le acompañó.

Aunque han pasado varios años desde que jugamos el último “StarCraft” (Brood War – 1998), “StarCraft II” toma lugar cuatro años desde los sucesos de dicha expansión. Esto es un acierto para los fanáticos del juego, que temían que si se lanzaba la segunda parte, cambiaría toda la historia y se perdería la magia que le hizo exitoso instantáneamente e influyente a través de los años. De hecho, las consecuencias del primer juego y la expansión, como la destrucción del planeta Ajur, se dejan notar. Regresan personajes conocidos como “Jim Raynor” y “Sarah Kerrigan”, se visitan la mayoría de los mundos que ya conocemos del juego original y la expansión, y otros nuevos.

“StarCraft II” cuenta con la mayoría de los elementos del juego original, tenemos a las tres razas en guerra, los humanos, los Protoss y los Zergs, pero a diferencia de éste, se le han añadido habilidades especiales a varias unidades dentro de las tres facciones. Por ejemplo, los Marines (humanos) ahora cuentan con un escudo, que carecían en el juego original y los Stalkers (Protoss), pueden teletransportarse a cortas distancias para cortarle el paso al enemigo, ¡excelente! Los Dragoons son vehículos que los Protoss han sustituido por los Inmortals, ya que no pueden producirlo por la destrucción de Ajur.

La gente de Blizzard realmente se botó a nivel gráfico. El trailer es impresionante y lo podemos encontrar tanto en http://www.starcraft2.com como en YouTube. En el mismo se presenta el proceso de instalación de armadura del marine Tychus Findlay. Ya con eso, se me salieron las babas y grite a los cuatro vientos: ¡yo quiero “StarCraft”!

En Internet, bajamos el trailer de casi 20 minutos, que demuestra varias unidades de las tres razas en batalla. El demo no es final, según se especifica, pero el “gameplay” es superior a mucho de lo que hemos visto en los últimos años. Se ha hablado de un lanzamiento a finales de éste, pero es sólo un rumor, no hay 100% de seguridad, ya que Blizzard es muy cautelosa con sus juegos y con cualquier duda al respecto, estaría retrasándolo para 2008. Esperamos que no, pero preferimos que a la que salga, que salga bien y no tengamos que estar a la semana instalando parchos en nuestras máquinas.

Prepárate, que este juego dará mucho de qué hablar.