Mientras el mundo reaccionaba al inicio de un conflicto bélico entre Estados Unidos y Siria, el rapero Vico C se encargaba de devolverle a cerca de 14,300 personas aquellos recuerdos de juventud que quedaron marcados por sus éxitos musicales.

Hombres y mujeres, con una edad promedio de 40 años, muchos de ellos acompañados de sus hijos, llenaron el Coliseo de Puerto Rico a capacidad, y desde que se escuchó el primer tema, “Cosa nuestra”, cantaron, bailaron y vacilaron con el artista como en los años 90, cuando las corrientes de la música urbana apenas se asomaban en los partys de marquesina.

Vico C tomó por primera vez la tarima de esta importante arena con la madurez de quien ha caminado, en buenas y malas, por el género urbano haciéndose llamar el “Papá”. Ciertamente, el intérprete de 46 años, aún exhibe la agilidad escénica y la bravura rapera con la que ahora conquista a nueva generación que lo conocen -mayormente- por influencia de sus padres.

Introducido por el locutor Jorge Pabón “El Molusco”, el concierto comenzó a las 9:45 p.m., con la proyección de un vídeo con imágenes entre el pasado y el presente de Vico C, y de inmediato, inició un repertorio de 17 títulos, que incluyó cuatro “medleys”, y la integración de una variedad de invitados, entre familiares y artistas.

“Cosa nuestra de barrio”, En honor a la verdad”, “Saboréalo”, “Tony Presidio”, “La recta final” y “Yogurt” avivaron el ambiente, que solo bajó de intensidad en lo que suponía ser un segmento de comedia. En este espacio, Vico C compartió el proceso de entrenamiento que experimentó como preámbulo a esta serie de conciertos. El relato no provocó gran efecto en la audiencia.

“No sé qué ustedes opinan, pero antes yo no me veía así”, dijo para introducir su “stand up comedy”.

(andre.kang@gfrmedia.com)
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Tampoco hubo reacción positiva cuando el intérprete hizo referencia al expresidente venezolano Hugo Chávez para compararse con él, al encontrarse en el escenario y verse reflejado él mismo en múltiples pósters. 

Contrariamente, los temas que interpretó junto a sus invitados fueron los más celebrados. Inició con su hija Enni en “Me acuerdo”, Jossie Esteban en “Blanca”; “Menéalo” con Lisa M; Gilberto Santa Rosa y Ángel López en “Lo grande que es perdonar”; Pirulo en “Inglesa”, su hijo Loupz (protagonista de la película ‘La vida del filósofo’) en “¿Cómo?”; Funky en “Quieren”, “Dándote vida” (con esta hizo mención de un momento en que sufrió una sobredosis de drogas) y “Aquel que había muerto”, y Jowell & Randy y Moncho Rivera en “Bomba para afincar”.

Las canciones se escucharon sólidas, tanto en la interpretación como en el acompañamiento de la banda. El cuerpo de bailarines trajo al presente la misma estampa de las viejas presentaciones del rapero.

(andre.kang@gfrmedia.com)
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“María” soltó los cuerpos y los hizo brincar. Estaban ya calientes para “Bomba para afincar”, que esta vez tuvo otra energía con Jowell & Randy y Moncho Rivera para rendirle tributo al sonero Ismael “Maelo” Rivera.

“El Filósofo del Rap” se emocionó casi al cierre de regreso a su patria. Pidió perdón por el tiempo que estuvo alejado de los escenarios locales.

“No es fácil que de momento la gente de tu tierra por cosas que tienen que ver con negocio no sepan lo que está pasando”, expresó. “Yo quiero mi tierra, yo quiero rescatar mi tierra con mis letras… Ustedes no se imaginan lo que han sido estos últimos 10 años”, lamento para seguido agradecer a Dios por lo que tiene y lo que le quitó.

Vico C alteró a último momento el orden de las canciones, e hizo a honor a la isla interpretando “La Borinqueña” bajo una lluvia de confetti. “Que viva mi patria Puerto Rico”, afirmó antes de despedirse, pero faltaba la canción más esperada: “Viernes 13”.

Con el público de pie, el artista cerró su regreso demostrando que aún está vigente en el género con que dio paso a todas las figuras que hoy día ocupan la música a ritmo de reguetón.

La segunda función de este concierto será el viernes 20 de abril, en este mismo escenario.