El secreto para mantener de pie una institución musical como Los Cantores de Bayamón no ha sido fácil para su fundador, José Raúl Marrero, quien lleva tres décadas impartiendo la alegría navideña a través de sus canciones.

Sin embargo, el cantante y compositor está claro de que para continuar cosechando la aceptación del público, “nos tenemos que mantener innovando”.

Así lo expuso durante una entrevista en con la periodista Shakira Vargas Rodríguez, como parte del segmento ‘Un café en la plaza’ del evento Somos Puerto Rico de GFR Media, en las instalaciones de Los Trailers en “El pueblo del chicharrón”.

Allí recordó que sus raíces en la música provienen de sus abuelos y padres, con los que participaba de parrandas familiares.

“Mi abuelo tocaba el cuatro y mi abuela con un tenedor tocaba el güiro. Siempre estaba ese ambiente de la música, especialmente en Navidad, con el personaje que se llama ‘Yayo’. Luego de eso, mi papá, que le encanta cantar, formamos unas parrandas familiares. Era un momento donde yo lo veía feliz a él, al igual que el rostro de mi abuelo… feliz”, relató.

“O sea, yo relaciono la música con alegría, con felicidad. Eso fue naciendo en mí, ese amor por la música, desde niño. Como veía a mi abuelo con esa cara de éxtasis cuando tocaba el cuatro, yo sentía como si el cuatro tuviera una magia. Entonces, mi mamá me apoyó y me inscribió en unas clases de cuatro en Sierra Bayamón”, sostuvo.

Así fue como José Raúl obtuvo su formación musical, cuando aprendió a tocar “un poco de cuatro”.

“Me enamoré. Mi mamá tenía un componente y ponía la música de la Tuna de Cayey, de los Cantores de San Juan, de la Tuna de San Juan, Chuíto el de Bayamón, Ramito; de toda esa gente que influyeron en mi vida de una manera especial, muy linda para mí”, confesó.

Asimismo, Marrero resaltó que su decisión de crear una canción de parranda fue para contrarrestar el dominio de los temas de doble sentido.

“El año me paso buscando un buen aguinaldo y en noviembre empiezo a cantarlo: Pa’ ver si me prendo. Así nació esa canción. Se la llevé a Ramoncito Rodríguez, que en paz descanse y, me dijo: ‘Raúl, trata de terminar un disco completo’, porque esa canción, junto a otras canciones que le llevé, pues tenían un potencial comercial”, confesó.

“Yo no sabía qué nombre ponerle al grupo y, se me ocurrió que, como la mayoría era de Bayamón y ensayábamos en el barrio Braulio Dueño de Bayamón, y las parrandas se daban en Santa Juanita, Bayamón. O sea, como que todo era Bayamón, y dije: ‘Vamos a ponerle Los Cantores de Bayamón y, así se quedó”, apuntó.

El concepto -integrado por amigos y familiares de Marrero- ha evolucionado en sus 30 años de fundación. Ahora es una orquesta.

“Si te quedabas con el mismo sonsonete, está chévere; nos apoyaron y el grupo creció muchísimo, pero llegó un momento dado que había que evolucionar. Entonces, nos fuimos por esa ruta y a la gente le ha agradado muchísimo el concepto nuevo de instrumentación”, confesó.

Su nueva producción, titulada “Puerto Rico es una Fiesta – 30 años, 30 canciones”, recoge la trayectoria musical de la legendaria agrupación bayamonesa, a través de un cedé doble.

“Grabamos un cedé, acompañado de un devedé. A la gente les gustó el concepto porque era dirigido mayormente a la diáspora. Entonces, hicimos un cedé doble, ‘30 años, 30 canciones’. Se puede conseguir en las Tiendas Me Salvé porque tenemos una alianza con los Centros Sor Isolina, que parte de las ganancias son para la obra social”, manifestó al destacar que, el tema principal del nuevo ofrecimiento es: ‘No te hagas’.

“Yo creo que Los Cantores de Bayamón nos tenemos que mantener innovando. Estamos siendo bombardeados con una cantidad de música urbana, que alguna de esa música tiene letras positivas, porque mi hermano, cultiva la música urbana. No podemos categorizar la música urbana como que toda es negativa. Creo que debemos seguir cultivando esto, de nuestras costumbres y tradiciones y, a la misma vez, que se convierta en un vehículo. Yo quiero seguir creando”, concluyó.