Mad Love es un trabajo que confronta a Draco Rosa con sus desamores, con ese ser interno que para el 2004, cuando lo grabó, parecía intuir su presente.

Ahora escucha temas como “California“ y le asusta la vigencia. “Es una canción que se hizo hace muchos años y tiene más relevancia hoy que en aquel momento. Es muy raro en lo personal“, dijo el artista en videoconferencia desde su aislamiento en Isabela.

El compositor, músico y cantante, de 50 años, volvió a acercarse al doble álbum nominado al Grammy Latino a la Mejor Grabación del Año (2004) para relanzarlo en un formato de vinilo remasterizado por Bob Lugwig (11 veces ganador del Grammy).

“Estoy más satisfecho hoy que en el 2004”, afirmó de la sutileza del resultado, que el público también puede encontrar en formato digital, y no descarte que en un futuro tenga una versión instrumental, al igual que de “Vagabundo” (1996).

La nueva versión del repertorio de 13 títulos en inglés y tres en español -creado sobre fusiones de rock, blues y sonidos auténticos del trópico-, es una amplia representación artística al armonizar la música con la pintura del puertorriqueño Richard “Tiago” Santiago en la carátula.

La relación que los une como cuñados trascendió a un retrato en el que el pintor derramó las emociones que carga el contenido musical, como también las energías y luchas que moldean a Draco en la actualidad.

“Si hay algo que encapsula a Draco y es algo que siento que me encapsula a mí también es hacer un trabajo con contenido y con emoción”, expuso Santiago, quien tuvo como única petición que el azul índigo estuviera presente en la obra.

Este arte será subastado próximamente para recaudar fondos para la fundación Vox Forte Alliance, a través de la cual el cantautor ayuda a pacientes de cáncer. Se crearán además una serigrafías con el mismo objetivo.

La palabra fe, tenemos que creer en eso. No podemos creer en eso a veces. Si tienes fe o crees que va a estar todo bien, tienes que estar en eso”

-Draco Rosa, cantautor y músico

Draco mantiene el aislamiento social entre Isabela y su finca, Monte Sagrado Reverse, en Utuado. La visita a diario para sembrar u observar sus cosechas, y mantener su dieta vegana.

“En este momento me ha servido mucho mantener una calma y una cierta alegría, una cierta esperanza, porque estoy muy en el momento, y el momento es observar las pencas que se están cayendo y tengo mis herramientas y el puro placer de ver la papaya. ¡Estoy loco porque se den mis papayas para consumirlas con el limón del patio!“, compartió.

Ha preferido desconectarse un poco de las Informaciones sobre el Covid-19, o Covi-da20, como le llamó, para centrarse en estar bien. “Hay tanta confusión, es muy difícil saber dónde encontramos la verdad. Prefiero estar en el momento y sentir una verdad muy personal, que es una verdad muy ancestral, muy de la intuición personal”.

El concierto sigue

El artista habla del “new normal”, o la nueva normalidad, sin realmente saber la realidad que dejará el post-pandemia, pero sigue entusiasmado con poder realizar su concierto el 20 de noviembre en el Coca Cola Music Hall, en El Distrito.

Será la primera vez que suba al escenario con un director musical, Ángel “Cucco” Peña, para cantar las letras que ha escrito y producido para otros artistas, como Ricky Martin, Ednita Nazario o Soda Stereo, o que han sido parte de la banda sonora de una película.

“El mundo lo hemos visto en tiempos difíciles y tenemos que ajustar, adaptar a esta cosa ´new normal´y ver la que hay, pero no podemos vivir sin música y no podemos vivir sin congregar, hay que buscar cómo congregar”, expresó optimista. “Es un show bastante lindo, único, y necesito un director musical, y ya hablé con Cucco y se apuntó. Por eso cuando vi que estaba en el hospital dije, ´Dios mío”, pero ya está bien y creo que está recuperándose, así que vamos a atacar”.

Con Peña trabaja en dos temas inéditos que serán parte de un proyecto más “healing”, o sanador, del que esta vez no abundó para no restarle novedad.