Durante la pasada celebración del Día de los Enamorados, estudiantes de séptimo grado de la escuela pública Basilio Milán Hernández de Levittown, Toa Baja, grabaron un vídeo interpretando la canción “Por tu culpa” del cantante urbano Jay Wheeler.

Lo que menos esperaban los estudiantes hoy es que, durante la celebración de la Semana de las Matemáticas, recibirían la visita sorpresa de su ídolo musical.

En el salón multiusos se llevaba a cabo una actividad donde estudiantes, además de ser premiados por su esfuerzo académico, prepararon un número musical para deleitar a los presentes. ¿La canción? El nuevo sencillo del artista: “Mensaje de voz”.

Ataviadas con pantalones cortos negros, tenis y camisas con letras que al juntarse formaban el nombre del artista comenzaron su presentación. El salón estaba oscuro y solamente las luces de la tarima alumbraban a las adolescentes que cantaban y bailaban. Por sorpresa, llegó hasta la tarima Jay Wheeler, quien comenzó a cantar con ellas entre los gritos de todos los estudiantes que reconocieron a su estrella.

Después de cantar, José Ángel López Martínez -nombre de pila- saludó a todos los presentes y se sentó en el borde del escenario. Comenzó a hablarles de su propia experiencia en sus años en la escuela donde las burlas lo hirieron en gran manera.

“Lloré muchísimo, pero aprendí a rodearme de personas que estaban dispuestas a darme el verdadero valor que uno merece”, contó, según un parte de prensa. 

Los invitó a no burlarse de lo demás ni a molestar a sus compañeros porque son muchos los que sufren y se afectan.

“Ama a las personas que están alrededor de ti. Todo el mundo es diferente”, sostuvo.

Los estudiantes le pedían que cantara “Por tu culpa”; primer sencillo de Jay Wheeler que ya sobrepasó de manera orgánica las 1.4 millones de vistas en YouTube y está cerca de alcanzar los 2 millones de reproducciones en Soundcloud.

El cantante complació a su fanaticada y todos los estudiantes corearon la canción con él. Tuvo que volver a cantar un pedacito, y esta vez, Jay invitó a los estudiantes que habían participado en la presentación a subir a la tarima. Entusiasmados la cantaron con él.

Le entregaron una placa en agradecimiento por el apoyo y desarrollo de la juventud, ya que sus canciones son románticas y carecen de palabras soeces.

“No me lo esperaba. Y aunque se vea sencillo, para mí es una bendición recibir un regalito de parte de ustedes y créanme que lo voy a llevar como un recuerdo súper bonito de parte de todos ustedes en el corazón hasta que me muera”, prometió emocionado.

Los instó a perseguir sus sueños, y a no darse por vencidos. “Nunca dejen de soñar. Siempre sigan sus sueños. Mi sueño era cantar y ahora estoy aquí”, apuntó el artista urbano.

Las fotos, los selfies, no se hicieron esperan. Y, al salir del salón, estudiantes de octavo y noveno grado lo esperaban para cantar con él y tomarse más fotos. Jay Wheeler los complació.