La cuatrista y compositora Fabiola Méndez puede hablar de identidad a partir de su música. Esta semana presenta su cuarta producción discográfica, “Flora campesina”, y su contenido es el reflejo de una artista que trascendió de la música jíbara para afianzarse con un estilo que abraza el folclor puertorriqueño desde una perspectiva joven, actualizada, representativa de lo que es llevar la patria consigo siendo parte de la diáspora en Estados Unidos.

El álbum se compone de 10 temas inéditos, todos con la firma de Méndez, y en cada uno se pueden identificar géneros tradicionales como la danza, pasillo, seis, bomba, guaracha y rumba, junto con unas fusiones de melodías folclóricas con armonías no convencionales.

“Esta producción es un regreso a la raíz de lo que siempre ha sido mi sonido, que es la música jíbara”, apunta la músico, cuatrista graduada de Berklee College of Music. “Siento que en la primera producción discográfica (2009), que se tituló ‘Herencia criolla’, era mucho más joven y musicalmente hablando era bastante típica, pero ya cuando saqué ‘Al otro lado del charco’ (2019) y ‘Afrorriqueña’ (2021), que son mi segunda y tercera, me fui bastante más con las influencias que había aprendido en Berklee; quise explorar con el jazz. Ya con ‘Flora campesina’, pues quise regresar a melodías tradicionales de nuestro folclor, de lo que son los seises, los aguinaldos, las formas también, los géneros tradicionales como lo es la danza, el pasillo, pero todas las obras hacerlas composiciones originales que también tuvieran parte de lo que soy yo”.

En esta ocasión, Méndez no se limitó a tener colaboradores invitados para la ejecución de las canciones, sino que además les hizo parte del proceso creativo. “Tengo colaboraciones con varios trovadores que me escribieron algunas de las décimas que interpreto en el disco, y también tengo otros músicos que me colaboraron con arreglos de las composiciones y no solo en esa parte de la creación, sino también en la ejecución. Tengo cuatristas, otros trovadores y cantantes que están participando en el disco para abrir espacio y mostrar que esto es una comunidad, que no tiene que ser que porque es mi disco tengo que ser la única cuatrista, sino mostrar esa apertura a que otros músicos que hacen lo mismo también tengan ese protagonismo y se pueda crear ese espacio de hacer música juntos”, expuso.

De esta forma aparecen en los créditos Modesto Nieves, Maribel Delgado, Arturito Santiago, José Eduardo Santana, Noelis Guzmán Sáez, Tifanny Román y el Orfeón San Juan Bautista, entre otros.

El álbum físico incluyte 11 grabados del artista plástico Kenneth Salgado.
El álbum físico incluyte 11 grabados del artista plástico Kenneth Salgado. (Suministrada)

“Una de las décimas me la escribió Noelis Guzmán Sáez, que es una joven trovadora y se titula ‘Cielo campesino’. Le pedí una pieza que honrara a todos esos músicos trovadores, trovadoras, que han forjado la tradición de nuestra música típica, entonces ahí ella tomó esa asignación y escribió cuatro décimas, cuatro estrófas hermosas, mencionando diferentes figuras. Por ejemplo, los hermanos Morales Ramos, el maestro Ladi, La Calandria (Ernestina Reyes), y todas estas personas que ya están en ese cielo campesino, porque ya pasaron, pero que gracias a ellos hemos podido mantener esta tradición y seguirla modernizando, y que nos siga acompañando a lo largo de los tiempos y de nuestra historia”, detalló.

Me siento en un lugar bien privilegiado, bien bendecido porque tengo tantos compañeros músicos que luchan por sacar sus proyectos para adelante, por grabar sus discos, y poder hacerlo y vivir de esto es definitivamente un privilegio, así que no lo doy por sentado y lo tomo como la gran responsabilidad que es ser cuatrista en otra tierra”

-Fabiola Méndez, cuatrista y compositora

Musicalmente, la cuatrista se unió al maestro Modesto Nieves para formar una orquesta jíbara con la presencia sonora de la bordonúa, el tiple y el cuatro. Hay temas que, asimismo, muestran una exploración mezclando los sonidos acústicos con otros más electrónicos.

“Eso es algo que nunca había hecho, es totalmente nuevo para mí, explorar con los sonidos electrónicos, pero a la misma vez no quería que fuera muy intenso, porque me encanta la música acústica, entonces es contrarrestar ese balance y Tifanny (Román) hizo un trabajo tremendo”, destacó la educadora de la Longy School of Music en Cambridge.

Vivir en Estados Unidos provocó un autocuestionamiento en esta artista sobre quién es, cómo y por qué acogió el cuatro como su instrumento, y cómo usar su talento para fomentar su cultura y unificar a partir de la música.

“Estamos viviendo un momento histórico en el cual la juventud hemos visto durante toda nuestra historia cómo a través del colonialismo nuestra identidad se siente afectada y creo que arraigarnos y abrazar lo nuestro es una forma indirecta y directa de lucha. Este es nuestro idioma, esta es nuestra música, esta es nuestra comida, esta es nuestra forma de vestir, y todo eso para abrazar esa identidad, y creo que eso ha ayudado mucho a lo que es nuestra música folclórica, no solo la jíbara, sino la bomba y la plena”, puntualiza.

Al final, lo que todos queremos es que nuestra música continúe, que no muera, y para hacer eso tiene que seguir caminando con nosotros”

-Fabiola Méndez, cuatrista y compositora

“Flora campesina”, en su versión física, sale al mercado con 11 grabados del artista plástico Kenneth Salgado, uno por canción, además de la carátula. De esta forma la gestora del trabajo musical propone una experiencia multisensorial a partir de las raíces sonoras y visuales. Ya está a la venta a través del portal www.fabiolamendezmusic.com.

Méndez tendrá una presentación tipo listening party este jueves, a las 7:00 p.m., en el Teatro Victoria Espinosa en Santurce. La actividad es abierta al público general y será gratuita.