Ismael Miranda sorprendió hoy en la tarde a los animadores del Día Nacional de al Zalsa en su edición número 39, que se celebra en el estadio Hiram Bithorn en San Juan.

Al entrar a la tarima, El Cacique (Marcos Rodríguez), El Hachero (Luis Antonio Hiraldo) y el Búho Loco (Néstor Galán) se miraron entre sí. De pronto la orquesta dirigida por el maestro Isidro Infante comenzó a tocar y el coro no se hizo esperar “Señor sereno, porqué me manda a dormir”… y la voz de Miranda comenzó a escucharse a todo dar en el estadio tras éste cantar varios estribillos y soneos, que puso a gozar al público en general.

“Pero… ¿y ésto?, dijo El Cacique. “Tremenda sorpresa que nos ha dado Ismael Miranda. No se esperaba que viniera a cantar. Vino aquí a recibir un premio, pero esta es tremenda sorpresa para ustedes los salseros y el pueblo de este evento”, dijo El Cacique, actual programador de la emisora salera, Z-93.

Miranda, de 73 años, recibió en la tarde el Premio Estrella, el cual se otorga de manera muy especial año a año en este evento internacional que se celebra en Puerto Rico y que monta la cadena SBS y la estación radial Z-93. Sobre 25 mil fanáticos se dieron cita a este evento.

Sobre 25 mil salseros llenaron el estadio Hiram Bithorn para escuchar buena música y bailar de lo lindo.

El cantante y compositor, con una trayectoria de largo alcance en ambas ramas, llegó a tarima acompañado de su esposa e hijos, así como del cantante y pastor, Alex D’Castro, y de inmediato el público lo recibió con tremenda ovación.

“Muchas gracias a ustedes. Yo estaba en mi ‘caucho’ acostado y me dije, voy pa’ allá, no por mí, sino por ustedes, el público puertorriqueño. Gracias por el apoyo”, indicó Miranda, quien lució entonado en sus soneos, pero todavía la falta fuerza en su timbre de voz.

En enero del 2021, Miranda sufrió un derrame cerebral que luego le requirió una operación de emergencia para controlar un edema, evento que finalmente le dejó un tanto afectado el habla, su actividad motora y el balance del cuerpo.

Se vio, sin duda, entre la vida y la muerte.

Largos meses de rehabilitación y recuperación ya lo tienen de pie y con mayor funcionalidad, por lo que sigue muy agradecido a Dios, según confiesa y agradece el gran afecto de sus seguidores y fanáticos.