El reconocido intérprete Jerry Rivas, quien por más de cuatro décadas ha sido una de las voces principales de El Gran Combo de Puerto Rico, reflexionó sobre la grandeza musical del maestro Rafael Ithier y la huella profunda que deja, no solo cómo músico, sino también para quien lo abrazó como parte de su familia.

El fundador de la “Universidad de la Salsa” falleció ayer, sábado. Tenía 99 años. “Se nos fue un arquitecto, un batallador, un luchador”, expresó Rivas en entrevista telefónica con Primera Hora desde Orlando, Florida, donde la agrupación se presentará esta noche.

“No ha sido fácil, pero estamos aquí. Se habló y se decidió que lo vamos a hacer porque yo creo que eso es lo que él quería. Y se lo dedicaremos”, prosiguió sobre lo que anticipó será un momento de sentimientos encontrados para los integrantes del grupo.

Las emociones afloran al rememorar sus inicios en El Gran Combo de Puerto Rico, lejos de imaginar la grandeza que alcanzaría con el paso de los años como integrante de la famosa institución musical.

“Mi vida cambió porque me dio la oportunidad de mi vida al pertenecer a un grupo como El Gran Combo de Puerto Rico”, expuso con voz entrecortada. “Ya son 48 años y estaré eternamente agradecido por esa oportunidad. Lo voy a recordar como un padre. Yo tenía apenas 21 años y aprendí todo lo musical y, como persona me enseñó muchas cosas, especialmente la disciplina y a ser correcto y respetar el trabajo”, afirmó el artista, quien comparte funciones como vocalista junto con Joselito Hernández y Anthony García.

La jovialidad y el afán del arreglista para que reinara la armonía entre los miembros del grupo eran aspectos que caracterizaba al famoso pianista.

“Él era una persona muy espontánea y, claro, ya con su trabajo, era muy serio y disciplinado, y respetando siempre al público. Estaba pendiente al compañerismo porque El Gran Combo es una familia. Siempre estaba pendiente a sus hijos, y a su hijo mayor, que es El Gran Combo de Puerto Rico y siempre lo cuidaba muchísimo”, resaltó sobre el padre de Carlos y Pedro, y sus hijas Thelma, Mérida, Ivonne y Maritza. Le sobrevive también su esposa, Carmen Soto.

La determinación de Ithier es otro de los aspectos que admira. “Estaba pendiente de todos los detalles. Era muy cuidadoso con sus decisiones. Él mismo decía ‘yo podré tomar decisiones correctas o no correctas, pero son para el bien del grupo’”.

Con más de seis décadas en el panorama musical, el conjunto es responsable de decenas de éxitos que incluyen “Sin salsa no hay paraíso”, “Y no hago más na’”, “No me vuelvo a enamorar”, “El ron de la tierra”, “Timbalero”, “Ojitos chinos” y “Brujería”, entre tantos.

El futuro de la agrupación

Uno de los momentos difíciles que atravesó Ithier durante su trayectoria fue el reclamo de regalías por parte del cantante Charlie Aponte, quien dejó la agrupación en 2014 para comenzar como solista. El pleito legal llegó a su fin en 2024 con un acuerdo entre las partes.

Jerry Rivas comentó que las experiencias difíciles llevaron al fundador de El Gran Combo de Puerto Rico a reflexionar sobre varios aspectos. “Se pudo haber terminado el grupo por las cosas que pasaron, que mucha gente ya sabe las que pasaron, y él batalló con todo eso”, dijo sin hacer referencia directa al conflicto legal. “Fue un luchador, pensando siempre en el grupo, en sus compañeros, y yo soy testigo de eso”, prosiguió con admiración.

“Yo estoy seguro que hace un tiempo atrás, él no veía un futuro de El Gran Combo si no estaba él, por todo lo que había pasado y como él veía las cosas. Recuerdo que siempre decía ‘esto hay que aprovecharlo hasta donde dé, porque ya cuando esto se acabó, todo el mundo para su casa’. Como quien dice, si él ya no está, pues…”, confesó.

“Pero hace unos años, vi que cambió. Que veía el futuro del grupo y veía la responsabilidad que tenemos nosotros los que estamos ahora, los que estamos llevando el negocio, y se sintió confiado, y yo veía que sí, que ya de último, estaba diciendo que sí, El Gran Combo podía seguir, así que, vamos a ver. Nosotros trataremos y siempre pensando en que él sigue con nosotros”.

Rivas, a su vez, reiteró el talento que por décadas mostró don Rafael para llevar a “Los Mulatos del Sabor” a su sitial internacional, con presentaciones en cinco continentes. “Cada vez que cantamos o tocamos su música, porque es su música, y yo veo cómo la gente la siente y se para de una silla, o se ponen a bailar y la sienten de la manera que la sienten, yo digo ‘eso es Rafael Ithier quien está logrando eso’. Era él, con su magia, con su idea, con su música, porque es su música. Y eso está ahí y va a estar por los siglos de los siglos”.

El cantante, a su vez, expresó su aprecio por el cariño del público hacia Ithier. “Quiero agradecer a Puerto Rico y al mundo por aceptarlo, por querer su música, que haya servido para tantas generaciones. Gracias por quererlo tanto”.