La propuesta musical de Pirulo y La Tribu continúa madurando el contenido que inició en el 2013 cuando salió al mercado el álbum “Calle Linda”. Ahora presenta “Calle Linda 3″, un trabajo discográfico que fue creciendo entre huracanes, terremotos y más reciente, con la pandemia, y que se haya dado dentro de esa realidad histórica, es una de las tantas bendiciones que cuenta el salsero de sonrisa amplia, pues para él no hay mejor antídoto que la música, en su caso, la salsa brava de la calle.

“La música siempre eso es lo que ha sido pa’ mí, un salvavidas. La música ha sido la vacuna mía ante todos los virus que pueda traer la vida y todos los dolores y todas las penas que puede traer la vida. Yo he convertido la música en mi medicina, y esta vez, con lo de la pandemia, no es la excepción”, declaró el cantante y músico en videoconferencia.

“Ante todo este año tan pésimo que hemos tenido y de tanto aprendizaje como humanidad, como gente y a donde a toditos nos dio miedo, y tuvimos ahí un miedo heavy a perder la vida, a perder los nuestros, a valorar las cosas simples, pues la música volvió a ser una labor heavy pa’ mantenerme fuerte, pa’ mantenerme firme ante mi familia”, sostuvo.

Esa fortaleza la lleva desde adentro hacia afuera. A nivel físico lleva un tiempo con una imagen de superhéroe caribeño que, más allá de la simpatía que carga, representa la fuerza positiva, el entusiasmo y la esperanza que propone a través de las 17 nuevas canciones que presenta en el disco.

“Mi música es bailable, es pa’ bailar, pa’ motivarte el ánimo, pa’ que le quieras subir el volumen, pa’ que la quieras escuchar en todo momento, pa’ que las familias la puedan escuchar; es importante que la sociedad consuma la música que nos dé fortaleza, que nos haga sentir mejor. Yo me dedico a eso, y no me gusta la pena, pa’ la pena y la tristeza está la vida ahí, muy clara”, apuntó el timbalero.

“Dios” y “Me gustas” son los sencillos que promueve en estos días y en estos desdobla su creencia en ese ser supremo y su creencia en la bondad de la gente, en esa cara linda de la humanidad.

“Mi primer disco fue con toda la ilusión del mundo, buscando que se reconozca mi música, buscando el sueño y pues, nos pegamos. Gustó, gracias a Dios. El segundo disco (’Calle Linda 2′), ya entonces estoy con una disquera multinacional, me sentía que tenía que probar que no era un golpe de suerte, ni era un producto fabricao’, sino que era un producto genuino, y que ‘La Calle Linda 2′ era lo que somos nosotros. Ya en este tercero, que uno va madurando, me siento más maduro como ser humano, como artista, como persona, y uno va creciendo y entendiendo también el papel histórico y el papel dentro de la música que me tocó tener. Es un disco más maduro, más aceptado, ya más firme en lo que es la carrera mía de artista y como músico”, puntualizó.