Su experiencia de vida fue la base que inspiró a Ángel Aguayo Rodríguez en la elaboración de sus personajes motivadores que, en sus coloquiales narrativas, llevan mensajes de superación por medio de la comedia. De diálogo relajado y amabilidad expresiva, don Ángel abundó sobre sus creaciones y a quienes impacta en sus presentaciones.

“En 1997 le di vida al personaje de Don Gume, quien se llama Gumercindo Pérez Cardona, mejor conocido como ‘El Gume Mentao’, que es mi personaje principal, el que alterno con otros que de igual manera entretienen con sus ocurrencias y anécdotas”, dijo.

El artista también dio vida al personaje de Catalino Tirado de la Torre, un “jíbaro casta’o que se distingue por ser un residente de la costa y más de la ciudad. Ambos son viudos, asunto que tengo como gancho para hacer de ello mis líneas humorísticas”, detalló.

El comediante lleva sus personajes, como "Don Gumercindo" a hogares de adultos mayores y égidas.
El comediante lleva sus personajes, como "Don Gumercindo" a hogares de adultos mayores y égidas. (Alejandro Granadillo)

“Entonces tengo además a don Carmelo Pérez Cortijo, quien es un cincuentón jamón medio ‘mama’s boy’ que se quiere casar y por ahí tiro mi línea. También tengo el de Don Eduardo ‘El Barbero’, que nace en honor a mi padre, quien era barbero de profesión... Don Américo, ‘El Abuelito de los Niños’, utiliza el arte para llevar su mensaje. Todas estas representaciones se hacen según el público que tenga y se alternan para no repetir y quemar los personajes”, agregó el artista de vocación.

Las apariciones de cada uno de sus personajes se producen como parte de los trabajos sociales que lleva a cabo la iglesia a la que asiste y sirve en su ciudad natal de Guaynabo.

“Trabajo con la Iglesia Ministerio Sanador, donde apoyamos con nuestros talentos del ministerio Corona de Honra, quienes semanalmente dan servicios a hogares de ancianos y hace 12 años que me dedico a este taller de arte en el cual llevo un mensaje a la vez que entretengo”, explicó.

“Además de égidas, también visito hogares de ancianos y se realizan actividades en centros de rehabilitación para drogadictos y alcohólicos, entre otros por esa misma línea. Las personas deben entender la diferencia entre ambas instituciones porque en las égidas están las personas mayores con algún tipo de independencia y movilidad, mientras en los hogares de ancianos, allí se trabajan con personas que requieren una mayor atención por sus condiciones, que en muchas ocasiones les imposibilita abandonar el centro. Hay muchos pacientes con memoria corta afectada por demencia o Alzheimer y con ellos en particular apelo a esa memoria emocional de antaño con el personaje Don Gume”, enfatizó.

Sobre este personaje en particular, al cual presta una mayor atención y aprecio, don Ángel dijo que utiliza canciones que quedaron en la memoria cultural colectiva y que tratan sobre el amor o estampas que remontan al escucha a reflexionar sobre su vida personal o aspectos que les motiven.

“La gente adulta mayor de edad goza mucho del personaje de don Gume. Me he dado el caso que la juventud no le presta mucha atención a la presencia del personaje, pero cuando escuchan la picardía del ‘Lelolay de Don Gume’, rápido sueltan el celular y se involucran en la fiesta, porque don Gume es una fiesta de folklor y tradición puertorriqueña”, manifestó.

Asimismo, Aguayo Rodríguez dijo que este proyecto artístico es un llamado de Dios y que, en cada presentación que hace gratuitamente, procura mantener una línea de respeto y profesionalismo.

“Evito caer en la chabacanería y el mal gusto porque tengo mucha experiencia de vida y de la idiosincrasia de nuestra cultura; su manera de hablar y muchos recursos que no necesariamente utilizan la mofa hacia el prójimo para hacer reír. Se me hace fácil recurrir al refranero coloquial para manejar los diálogos de cada una de mis representaciones”, expresó el también capellán voluntario del Departamento de Corrección y Rehabilitación por los pasados 27 años.

“Mi taller no es un negocio. Yo no cobro por lo que hago. En ocasiones las personas me dan alguna aportación, pero no es necesario porque no la requiero. Mi conciencia de agradecimiento está clara con el mensaje que llevo y cómo hago las cosas”, concluyó.

Para información, puede escribir a angelaguayo@hotmail.com.