Llevar a su pueblo de San Lorenzo la tradición de piragua raspada fue la motivación principal de Clarissa Huertas, una joven madre de 35 años, que creó su negocio Ágape Piraguas Artesanales para evocar nuestras costumbres y el disfrute de esos antojos que nunca pasan de moda.

Todo comenzó cuando ella se dio cuenta de que para darse ese gustito de una refrescante piragua tenía que viajar hasta la capital.

“Me vi llegando hasta San Juan buscando una piragua. Tenía que conducir 30 minutos para poder comerme una. Entonces dije: ‘¡vamos a hacer piraguas acá en San Lorenzo’. Nosotros ofrecemos lo que es la verdadera piragua puertorriqueña, que es raspando el hielo, se utiliza el cepillo y el bloque de hielo. Hoy en día muchos comerciantes utilizan lo que es la máquina eléctrica. Nosotros no, siempre utilizamos el cepillo”, relató la comerciante, quien es agente de bienes raíces desde el 2014. Con ese deseo de complacer el paladar y mantener viva la tradición, esta emprendedora samaritana comenzó su negocio en el 2017 junto a su esposo, Eric Cartagena. Su enfoque es presentar unas piraguas tradicionales, pero al mismo tiempo saludables, pues sus sabores no provienen de los acostumbrados syrups que contienen demasiada azúcar.

Se trata de un negocio familiar que Clarissa Huertas mantiene con su esposo Eric Cartagena, y que le permite llevar con ellos a su pequeña Germaine.
Se trata de un negocio familiar que Clarissa Huertas mantiene con su esposo Eric Cartagena, y que le permite llevar con ellos a su pequeña Germaine. (Xavier Garcia)

“Mi jarabe no es artificial, es de la pulpa de la fruta, por eso no contiene todos esos ingredientes que traen las piraguas regulares. Yo compro la pulpa, nosotros mismos la licuamos, la colamos de ser necesario, y tenemos ya 13 sabores disponibles: coco, parcha, limón, fresa, tamarindo, uva, arándanos (blueberries), crema, frambuesa, acerola, guanábana, china y melón de agua”, explicó la comerciante, quien desde el 1 de junio tiene su quiosco ubicado debajo de un árbol justo al lado de la pista atlética Agustín Reyes Flores, en San Lorenzo. De todos los sabores, Huertas afirma que el más pedido es el de tamarindo.

“Definitivamente, el de tamarindo es el más que me piden y, para refrescarse, piden el de melón, que es riquísimo. También me piden la mezcla de parcha y coco, que funciona igual que cuando te comes un helado del País”, mencionó la empresaria, quien posee un bachillerato en Contabilidad y un grado asociado en Gerencia.

Para Clarissa, su negocio representa el servicio a su gente. Por eso lo llamo Ágape, “que significa dar amor al prójimo incondicionalmente”.

A pesar de que su negocio fluye de manera orgánica, pues Ágape Piraguas Artesanales ofrece servicio en actividades privadas y que, agraciadamente, puede compartir su proyecto junto a su esposo y su pequeña hija Germaine Cartagena Huertas, de 1 año y 4 meses, el trayecto para esta familia no ha estado exento de retos. Cuando abrieron su negocio en el 2017, se ubicaron en el barrio Cerro Gordo, pero, al no ser un área tan concurrida, decidieron moverse al casco urbano de su pueblo, justo al lado de la Casa Alcaldía. Más adelante, optaron por pausar operaciones mientras buscaban el lugar idóneo para su carrito de piraguas.

“Llevamos 5 años con Ágape, pero estuvimos detenidos desde septiembre 2022 hasta el 1 de junio de este año, trabajando solo en eventos privados. Pero, los clientes nos han escrito que querían visitarnos, entonces buscamos una mejor ubicación con estacionamiento, un lugar seguro, que no hubiese tráfico cerca. El poder estar cerca de la naturaleza ha sido mi enfoque y así logramos llegar aquí bajo este hermoso árbol al lado de la pista atlética el 1 de junio”, comentó la joven madre.

Los planes de la pareja son continuar desarrollando su negocio, darse a conocer y llevar su producto a toda la Isla.

“A largo plazo, quiero crear una franquicia y tener un quiosco en las plazas públicas, al lado de las alcaldías, en los lugares donde uno se pueda enfocar en la cultura, en la música”, señaló Huertas, quien en su puesto también vende yogurt, gofio, cocteles y velas aromáticas, además de que brinda talleres para la confección de velas.

El carrito de Ágape Piraguas Artesanales abre al público de martes a jueves en horario de 2:00 p.m. a 6:00 p.m.; mientras que los fines de semana realizan eventos privados. Pueden conseguirlos en sus redes como: Ágape Piraguas Artesanales o llamando al 787-988-2283.