Expedición llena de encantos. Tener la oportunidad de ver las más de 65 especies de aves y 14 especies de cangrejos, entre otros peces y reptiles que forman parte del hábitat en el Río Espíritu Santo, único navegable en la Isla, resulta una experiencia enriquecedora para quienes se dan la vuelta en “La Paseadora”.

Micrófono y timón en mano, la capitana y propietaria de la embarcación, Evelyn García, es quien dirige cada excursión en el lugar, mientras cuenta la historia de la exclusiva ruta que inició en este río para los años 70.

“Este río es bien importante para nosotros porque en Puerto Rico hay 274 ríos aproximados y que tengamos el único navegable por embarcaciones pequeñas en el patio de nuestra casa es una bendición…”, acotó la capitana, quien tiene su negocio a orillas de la carretera #3 en Río Grande.

“No somos ni biólogos ni científicos, nosotros somos nacidos y criados al lado del río y todo lo que hemos aprendido con nuestros padres y nuestros abuelos es lo que le traemos”, destacó Evelyn durante una de las travesías en la que participó Somos Puerto Rico.

La ruta por esta reserva natural es de aproximadamente 6 millas y se realiza en un periodo de dos horas, ida y vuelta. Su punto final es la boca del río. Pero cuando están las condiciones apropiadas, puede llegar hasta el océano Atlántico con las debidas precauciones.

“Hay otros ríos que al final se cierran con un banco de arena. Este, toda la época del año se mantiene abierta. Ahora mismo hay un banquito de arena, pero cuando comience a llover va limpiando la boca y volvemos a tener la boca abierta como de costumbre”, aclaró la capitana.

El lugar es rico en biodiversidad marina y terrestre.
El lugar es rico en biodiversidad marina y terrestre. (Isabel Ferré Sadurní)

Además de la belleza natural de esta zona, el recorrido permite que Evelyn interactúe con los pasajeros y les cuente varias historias que rodean ese cuerpo de agua.

“Aquí habitaban los indios taínos; para esa época el río se llamaba Caraibon, luego le cambian el nombre porque empezaron a hacer bautismos allá en la montaña y se quedó Río Espíritu Santo. Para mí que hoy hubo bautismo porque el agua está muy sucia y por aquí es que bajan los pecados”, bromeó la guía turística.

¿Cómo nació la idea? La idea de hacer recorridos por “La Paseadora”, hace más de 50 años, se originó cuando el patriarca de la familia, Juan García, salió a pescar al Río Espíritu Santo y regresó hechizado por sus encantos.

“Mi papá salió a pescar y nos cuenta que ese día él quedó marcado con la belleza del río y él decía: ‘algún día ese terreno va a ser mío’. Y la gente se ata con las palabras, sea para bien o para mal, y así fue. Dios le dio la oportunidad de comprar el terreno”, contó la propietaria.

A los pocos días de haber conseguido el terreno, su padre compró un bote, al que llamó “La Viticue”, en honor a sus cuatro hijas Vicky, Tita, Cuca y Evelyn.

Así, comenzó a explorar la zona hasta dominarla y conocerla como la palma de su mano.

“Papi no conocía el río… no sabía que aquí había una piedra, ahí tuvo la experiencia de romper motores y fue aprendiendo la profundidad. Todo lo que aprendía, nos los enseñaba”, recordó orgullosa su hija.

Entonces, la familia emprendió su negocio que operó ininterrumpidamente poco alrededor de 11 años.

No obstante, una vez crecieron, las hermanas García tomaron otros rumbos y su padre decidió no zarpar, sin sus empleadas, por lo que sacó del agua la embarcación y dejó de dar sus recorridos.

No es hasta el año 2010 que Evelyn decidió retomar el negocio familiar.

La Paseadora.
La Paseadora. (Isabel Ferré Sadurní)

“Cuando le dije a papi que quería volver a sacar ‘La Viticue’… me dijo: ‘Nunca la debimos haber sacado del agua’… Se puso tan contento”, dijo.

“Él trabajaba conmigo, yo era la guía y él mi capitán. Lo disfrutó durante 10 años, él estaba feliz y lo hizo hasta que falleció”, dijo conmovida la hija. El patriarca falleció en el 2020.

Hoy día, Evelyn no solo se mantiene fiel a su legado sino que busca compartirlo con quienes se aventuran a dar el paseo por el Río Espíritu Santo.

Actualmente, estos recorridos se hacen por reservaciones, a un costo de $20 por pasajero (incluye IVU). También realizan eventos especiales como bodas, aniversarios y cumpleaños en la embarcación.

Operan, según las condiciones del tiempo, de jueves a domingo en horarios de 9:00 a.m., 11:00 a.m., 1:00 p.m. y 3:00 p.m. Para información adicional, puede llamar 787-612-3075.