Alicia Machado, quien ha sido actriz, presentadora, productora, empresaria y exreina de belleza, relató cómo vivió el acoso de la prensa a raíz de las burlas del expresidente estadounidense Donald Trump, mismas que le provocaron daños de salud a nivel físico y mental.

“Yo nunca fui una niña ‘bulleada’ hasta que llegué a las manos de Trump”, comentó.

Es importante mencionar que el exmandatario norteamericano había comprado los derechos del concurso de belleza cuando Alicia fue ganadora de dicho certamen.

“Yo fui su conejito de indias, sin yo poderme defender de muchas cosas”, dijo.

En entrevista con Yordi Rosado, Alicia quien además escribió un libro que no se ha publicado por las acusaciones hacia el exmandatario estadounidense, está basado en cómo superó la bulimia y anorexia crónica que padeció durante casi seis años de su vida, también habló de lo difícil y traumante que fue el año tras su victoria en Miss Universo 1996, por el bullying que recibía debido a su peso.

“Fue algo muy horrible, yo a raíz de ahí empecé a vomitar, tengo récord de 35 vomitadas por día, yo fui bulímica y anoréxica de las de a deveras”, expresó.

Alicia Machado contó que tras su victoria realizó viajes por el mundo lo cual la hizo subir unas 25 libras de peso, sin embargo, no era algo de lo que ella se avergonzara hasta que Trump y los medios de comunicación de ese entonces se burlaban de su peso, por lo cual en dicha entrevista dio un fuerte mensaje a sus retractores asegurando que ella jamás va a justificar lo que vivió, así ella hubiese subido mucho o poco de peso, pues entre los comentarios que recibía por parte del magnate eran “Miss Piggy o Miss Housekeeping”.

Asimismo la ex miss Venezuela contó cómo fue que Trump llegó al gimnasio donde ella iba a hacer ejercicio sin saber que era para realizar toda una campaña mediática hablando del peso de la venezolana.

La venezolana cuenta cómo ella pidió a la organización de Miss Universo que la ayudaran a bajar de peso y fue entonces que la mandaron a un gimnasio en Nueva York, el día que ella se presentó para empezar la rutina ya estaban más de 80 medios de todo el mundo así como el expresidente Donald Trump, situación que la abrumó a tal punto de no querer salir del cuarto donde estaba, sin embargo, por la presión de los medios tuvo que dar la cara.