Diez años y ocho filmaciones han transcurrido desde que el actor Daniel Radcliffe conquistó el interés de muchos con su dramatización del célebre personaje “Harry Potter” en la pantalla grande.

Ser testigos de su transformación ha sido inevitable. De aquel niño de 11 años de edad -a punto de cumplir 22 la semana próxima- no ha cambiado mucho. Todavía proyecta la imagen tímida y sencilla de sus primeros días.

Al vestir, los abrigos o las camisas de botones abiertas sobre una t-shirt, combinados con un mahón, parece componer gran parte de su guardarropa. De plano resulta obligada la observación de que su estilo en la vida real asemeja al del hechizante personaje.

“Hay que tener claro que su estilo en estos momentos sigue definido por su compromiso con el papel estelar de la película”, menciona la experta en modas Lizette Schettini respecto a la preferencia en la moda por el protagonista de Harry Potter and the Deathly Hallows: Part 2. “Es una imagen cuidada y protegida por el staff de la película”, reitera.

“Él es un joven delgado que utiliza mucha ropa suelta”, describe la también stylist de la agencia Única. “Su estilo es moderno y casual, en el que las camisas y los suéteres vestidos en layers (capas) combinados con jeans, son tan comunes. Claro, hay que recordar que él vive en un país con un clima frío, por lo que vestir ropa en layers es común”.

Ahora bien, será luego que culminen sus compromisos de promoción con la película que conoceremos el verdadero estilo del actor británico, y cuán cercano o distante está de la imagen que proyecta en la actualidad.

 

Stylist: Yajaira Méndez González