Miami.- El cocinero José Andrés pretende que el curso Arte Culinario Español, que ofrecerá desde enero próximo en Nueva York, sea el "caballo de Troya" por el que los estadounidenses conozcan mejor la diversidad de la gastronomía y la cultura españolas.

"La gastronomía española es el paladín de la marca España. Tiene que serlo", dijo en una entrevista con Efe a su paso por Miami el reputado cocinero, que consideró que los productos españoles son "grandes embajadores" de la imagen del país por el mundo.

Para lograrlo, José Andrés, una de las cien personas más influyentes en 2012 según la revista Time, prefiere apostar no tanto por la gastronomía vanguardista, que tanta repercusión internacional ha tenido en los últimos años, sino por la cocina de olla y cazuela, la de la fabada asturiana, la empanada gallega o el arroz con leche.

"Tenemos que volver al pasado, tenemos que aprender a enseñar a estos chicos como se hace la cocina española desde la base", dijo José Andrés, que dedicará apenas una lección a la gastronomía de vanguardia en su curso en el Centro Culinario Internacional de Nueva York.

Reconoció que lo que más "atrae" de España es el tipo de cocina que propugna el restaurante "El Bulli" y el cocinero Ferran Adri, pero "hay que ir más allá", pues, aseguró, una salsa tan común como el alioli como la que se hace en Cataluña "llama la atención tanto en España como en el extranjero".

El cocinero, que también enseña "Ciencia y Cocina" en Harvard, consideró que hay que apostar por la cocina tradicional, porque ésta será el motor que lleve a la exportación de productos españoles.

Lamentó que las empresas de alimentación españolas no se hayan animado antes en su internacionalización, tal y como se hizo en otros sectores, como la moda, con Zara o Mango como exponentes.

"Somos un país de grandes productos que tenemos que exportar y necesitamos una escuela que sea el nexo de unión con los cocineros del mundo", dijo.

En su opinión, no se ha "hecho lo suficiente para potenciar la gastronomía española" e insistió en su apuesta para crear centros gastronómicos en el exterior que enseñen los secretos de la cocina española a cocineros extranjeros.

"Está muy bien que haya institutos Cervantes por el mundo, pero quizás habría que tener la mitad de éstos, y tener institutos gastronómicos, con una vocación de enseñar a personas en los mercados en los que nos queremos abrir, como los emergentes, como India, China o Brasil, o Estados Unidos", opinó.

José Andrés, el primer cocinero en recibir la medalla de la Orden de las Artes y Letras que concede el Gobierno español, consideró que la "gastronomía genera muchos ingresos", pero que no se invierte en ella lo que se debería.

El responsable de catorce restaurantes en EEUU espera que en esta escuela se graduen no cientos, sino miles, de chicos y que sean parte de la recuperación económica española, abriendo restaurantes, importando productos o convirtiéndose en escritores y enviando turistas a España gracias a sus historias.

Con este curso de 11 semanas, aunque espera poder ampliarlo a 22 o 24, apenas se podrán "abrir ventanas" a la gastronomía española, porque incluso él, explicó, con todos sus años de experiencia, aún aprende cosas nuevas en cada visita a "casa".

Está previsto que este curso tenga en su primer año 44 alumnos y un coste de 24.000 dólares (unos 18.300 euros), aunque hay becas como las que financia el Grupo Campofrío.

Este programa incluirá un viaje final, con José Andrés como anfitrión y guía, en el que se mostrará "in situ" las bondades de la gastronomía española.

Confió en que en los próximos años el éxito de esta iniciativa lleve a la apertura de otros centros de enseñanza en los mercados emergentes.

José Andrés, que llegó a EEUU hace 23 años, recordó que su programa de televisión "Made in Spain", que se ha emitido en cerca de 30 países, fue parte de la idea de fomentar la imagen de España a través de su gastronomía y sus productos, y que ahora continuará en el Centro Culinario Internacional de Nueva York.

"Si con Made in Spain llegamos al público de a pié, llegó el momento de ir más allá y coger a chicos y convencerles de que se tienen que sumar a esta cruzada de ayudar a vender la cocina de España", concluyó el cocinero.